La investigación que puso la lupa sobre el modus operandi del patriarca de la banda de Los Monos, Ariel Máximo "El Viejo" Cantero, se sustenta en evidencia que parte de escuchas telefónicas. Los fiscales Valeria Haurigot, Franco Carbone y Gastón Ávila expusieron decenas de transcripciones y audios para acreditar su grado de jefe en una asociación ilícita cuyo móvil es el beneficio económico. A la par del Viejo, en la pirámide de esta estructura –de al menos 20 personas– fue ubicada su pareja, Rosana Bibiana "Bibi" Montero, de 30 años.
"Se comportan como dueños del territorio y ninguna actividad puede tener lugar allí sin su venia, la cual conlleva un pago", describieron los acusadores al matrimonio afincado en la Vía Honda del sudoeste rosarino. La actividad, claro está para la Fiscalía, es la administración y cobranza de la plata de los puntos de ventas de drogas, entre otras .
Sin embargo, la imputación muestra al Viejo Cantero y a la Bibi reacios a establecer comunicaciones con sus celulares, y la prueba que los compromete en los delitos más graves surge de menciones de otros imputados. Principalmente, de las febriles comunicaciones del transero Nelson Alexis Aguirre, alias Pandu, desde el penal de Coronda, donde oficia de pata de plomo y purga condena a 16 años por un homicidio cometido en 2015.
Este hombre es considerado jefe de una subestructura que depende del visto bueno de Cantero, con quien compartió pabellón tiempo atrás. La Fiscalía señaló que por el respeto que le profesa bautizó Máximo a uno de sus hijos, en honor al fundador de los Los Monos.
La tarde del 13 de noviembre de 2021, Pandu se comunicó con quien fuera su principal matón, Nazareno Gauna, y le comunicó que el futuro deparaba ganancias jugosas.
“El Ariel me dio semáforo verde para que cobremos todos los negocios a nombre de él. Vamos y Vamos. Negocio que no sea del Ariel, negocio que tiene que pagar”, anunció.
Y especificó: “Donde vos veas un negocio y dicen que es de él, bajá, preguntá para quien están laburando”.
Ese mismo día, Pandu le dijo a Gauna que vaya a presentarse en persona en la casa del Viejo Cantero, a quien también llama como “el hombre” o “Pelo Duro”.
“Él en este momento está en la casa. Andá a hablar con él, que tiene un montón de trabajo para hacer, para hacer cobranza, todo, todo, todo cobranza”, se entusiasmó Pandu.
Esa tarde calurosa, Naza Gauna le dijo a Pandu que estaba cerca de la casa de El Viejo, en Avellaneda y Uriburu. “Golpeale fuerte, puto, porque esta atrás en el patio”, le respondió Pandu.
De esas conversaciones surgió el modismo “cortar el pelo”, que para la Fiscalía no significa otra cosa que matar.
Pandu, que un mes después se distanciaría de su ladero porque éste empezó a salir con quien fuera su ex, Romina Berón (en prisión domiciliaria por una causa de venta de drogas), le dijo: “Cortale el pelo al que te diga, cumpa, vos cortale el pelo. Vos seguime a mí, guacho, que no te voy a volver millonario, pero vas a vivir bien”.
En otro pasaje, Pandu le confiesa a Naza Gauna: “Sabés cómo es el Viejo, se maneja igual que yo, boludo. Yo tengo la escuela de él boludo. Si hay algo que no me gusta, ya fue.
Además, Pandu, Naza Gauna, Romina Berón y Celestina Contreras –madre de Ariel “Guille” Cantero– fueron imputados por las balaceras cometidas el 14 de noviembre a las escuelas de Cafferata al 4000 y Magnano al 6300. Y por los tiroteos a dos estaciones de servicios: el 9 de noviembre a la Axion de San Martín y Saavedra. Y un día después, a la YPF de Lagos al 4900.
Esos atentados, según la Fiscalía, fueron un encargo de la Cele Contreras para “demostrar poderío”. Los autores materiales se desconocen, ya que se cree que fueron “soldaditos” reclutados por Gauna, quien luego de su visita a la casa de Cantero, se dirigió a barrio La Granada (donde vive Celestina) “a cobrar una moneda”. Incluso allí ubicó a su celular una antena donde impactó la llamada.
Para la Fiscalía, Berón fue la encargada de entregar ropa a uno de los pibes autores del hecho –apodado Chiquitín o Enanito– en concepto de pago por la acción criminal cometida.
Ese mismo día, Pandu entabló una charla con su pareja Brenda Barboza (también imputada en la asociación ilícita), donde otra vez no pudo con su incontinencia verbal.
“Por qué tanto glamour. Por qué te dan tantas cosas así”, le reprochó Brenda al recluso de Coronda.
“Vos qué te pensás, que me lo gané jugando a la bolita. ¿Quién te pensás que está tirando a las estaciones de servicios, las escuelas y eso? Acá no te dan nada sino es a cambio. Pero yo nunca fui así. Yo di y nunca me dieron nada a cambio. Yo nunca me fije nada en nadie, siempre fui una persona humilde, me conforme con lo que tuve”, reflexionó Pandu, sin imaginar que tenía el teléfono pinchado.
Estas fueron sólo algunas de las escuchas expuestas este miércoles, con relación al capítulo Pandu. La jueza Valeria Pedrana dictó un cuarto intermedio y la audiencia continuará este jueves desde las 8.30. Esta vez, los imputados seguirán el proceso por videoconferencia, anunciaron desde el MPA.