El ministro de Seguridad de Santa Fe, Pablo Cococcioni, destacó la recaptura del sicario Mauricio Laferrara en la localidad de Andino y catalogó la acción como un "objetivo estratégico" tanto de Provincia como de Nación.

En diálogo con Radiópolis Weekend (Radio 2) Cococcioni recordó que Laferrara había sido trasladado desde la cárcel provincial de Piñero al Servicio Penitenciario Federal (SPF) en 2021 con el objetivo de disminuir sus posibilidades de fuga tras el escandaloso escape de ocho reclusos en junio de ese año. 

El arresto inicial de Laferrara se había concretado en octubre de 2019 en barrio Echesortu, en un operativo encabezado por la Tropa de Operaciones Especiales (TOE). Por esos días, le atribuyeron seis asesinatos en su rol de gatillero predilecto del jefe criminal Esteban Lindor Alvarado.

Por entonces, dijo el funcionario de Santa Fe, la categoría de preso de "alto perfil" era sólo un "rótulo" porque este tipo de reclusos "no tenían restricciones". 

Paradójicamente, el último destino de Laferrara fue el penal federal porteño de Devoto, que a diferencia de las cárceles de Marcos Paz o Ezeiza, no es de máxima seguridad.

Laferrara logró fugarse del pabellón 11 del penal de la ciudad de Buenos Aires entre el 17 y el 19 de octubre de 2023, en circunstancias que se develaron con el paso de los días con recuentos de presos y análisis de filmaciones. En un principio, ni siquiera se sabía si estaba "vivo o muerto", recordó Cococcioni.

Hasta que una cámara del penal mostró cómo el día 17 un interno arrastraba con una soga un tacho de basura en cuyo interior, en posición fetal, estaba Laferrara, tapado por una manta y con basura encima. 

"El interno habría llevado naranjas, agua y galletitas de agua, un barbijo y una manguera para respirar, además de un celular con el que mantenía contacto con el exterior", señala un informe de hipótesis de la Justicia federal.

Laferrara, que posee dos condenas a prisión perpetua por cuatro crímenes y una condena por tráfico de drogas a cinco años en el fuero federal, estuvo prófugo ocho meses. Su recaptura "era un objetivo estratégico de seguridad", dijo Coccocioni.

Sobre la recaptura de Laferrara en Andino, Cococcioni dijo que los investigadores de la Unidad de Acciones Especiales (UAE) y la Policía Federal tenían el dato de su paradero, pero esperaron hasta confirmarlo, incluso con una foto. "Recién ahí se tomó la decisión de intervenir, porque el riesgo era muy alto", dijo el ministro.