La modalidad del fraude telefónico tuvo su correlato en modo premio de quiniela. Un hombre se presentó en la comisaría 10ª de Rosario para denunciar una estafa en la que también estaban involucrados sus tíos, que viven en la ciudad correntina de Santa Lucía.
¿Cómo fue el mecanismo? La víctima de la trampa telefónica recibió un llamado de un supuesto representante del Bingo La Lotería, para pedirle que se dirija a un cajero con su tarjeta de débito y así recibir $60.000 que le correspondían a los familiares que residen en el litoral argentino.
Previamente, la tía del denunciante se había dirigido a un banco, mientras su esposo no debía cortar la comunicación en la que fue anoticiado de ser acreedor de un premio. Como presumiblemente ella cometía errores, le solicitaron los datos de un familiar y su número telefónico para finalizar la operación.
Al mencionar a su sobrino, éste fue contactado por un número con prefijo 011, desde el que hablaba un joven con tonada cordobesa. Tratando de ayudar a que sus tíos cobren el premio que les prometieron, siguió los pasos que le indicaban y operó sus dos tarjetas de débito. Desde una transfirió $19.000 y desde otra, $49.000. En lugar de recibir $60.000, terminó transfiriendo $68.000 quedándose así sin resto en sus cuentas.
Si bien el número desde el cual se hicieron las llamadas entrantes está identificado, aún no hay precisiones de la ubicación de los estafadores. La única certeza es que a quienes les prometieron ganar dinero, lo terminaron perdiendo.