Benjamín, el nene de 8 años que recibió un impacto de bala en la cabeza cuando precalentaba para jugar un partido de fútbol el pasado sábado, continúa en cuidados críticos en el hospital Víctor J. Vilela. El nuevo parte de salud brindado por las autoridades indica que sigue con pronóstico reservado y que no tuvo variaciones con respecto a este domingo tras las dos intervenciones quirúrgicas en el cráneo. "Los datos de estabilidad son positivos", dijo la subdirectora del centro de salud, Carolina Binner.
La autoridad del Vilela informó en el programa A Diario (Radio 2) que Benjamín "está en el área de cuidados críticos, internado con respirador, hemodinámicamente compensado y en coma farmacológico". "No tuvo variación su presión. Los datos de estabilidad son positivos", agregó.
"Cuando hay un traumatismo o una lesión por un proyectil se causa un edema en el cerebro. Hay que esperar que se vaya desinflamando, controlar la presión intracraneana e ir viendo su evolución", concluyó Binner.
El nene recibió un impacto de bala en la cabeza el pasado sábado a las 14.15, cuando precalentaba para jugar un partido de la Liga Rosarina en bulevar Seguí y Garzón. Quienes estaban con él pensaron que se había desmayado y que se había cortado la cabeza al caerse sobre un vidrio.
"Me dijeron que se cayó y se desmayó, pensaron que se había caído porque le había bajado la presión, porque podía estar mal comido y que se había cortado con un vidrio. Como no venía la ambulancia un papá lo trajo al Vilela donde se encontró con médicos terribles. Mi hijo me fue a buscar y vinimos, cuando llego ya estaba lista la tomografía y sale que era una bala en la cabeza", contó Javier, el padre del pequeño, a Radiópolis (Radio 2).