Una mujer quedó detenida tras ser acusada de elaborar notas con mensajes mafiosos y amenazas relacionadas con la coyuntura de violencia narcocriminal que afecta a Rosario. Los escritos aparecieron en domicilios de la zona noroeste entre fines del convulsionado mes de marzo y a comienzos de abril. Dos de ellos, en el portón de un supermercado chino. Y el restante a unas ocho cuadras, en una vivienda particular.
El primer hallazgo fue el 25 de marzo en el comercio de capitales orientales de Ghandi al 7200. El anónimo arremetía contra “el Estado” y prometía violencia en represalia por las políticas penitenciarias. Un mensaje aparecido días después de la saga de homicidios de cuatro trabajadores que puso en vilo a la ciudad a comienzos de ese mes.
Las otras notas, halladas el 1° y el 6 de abril, tenían mensajes dirigidos al capo narco Julio “Peruano” Rodríguez Granthon. Las misivas aparecieron en Nicaragua al 100 bis y luego, otra vez, en el súper chino.
Por esa seguilla, el fiscal Lisandro Artacho le atribuyó este martes a Ester R. D. la confección de las notas dirigidas a “amedrentar anónimamente”.
El juez Pablo Pinto tuvo por formalizada audiencia dictando la prisión preventiva efectiva por el plazo de 60 días por los delitos de amenazas coactivas calificadas por ser anónimas –tres hechos–en carácter de coautora en concurso ideal con intimidación pública.
No es la primera vez que los patrones y trabajadores del súper chino de Fisherton Industrial sufren el mal trago de que su lugar de trabajo sea utilizado como buzón de mensajes del hampa. El 9 de febrero de 2023 el comercio apareció baleado y con una declaración de guerra relacionada con un conflicto entre facciones de la banda de los Monos.