Tras el hallazgo de un teléfono fijo en la celda de Ariel Máximo “Guille” Cantero en el penal de Marcos Paz, y en el marco del juicio por las balaceras que justamente le imputan al líder de Los Monos de haber ordenado desde la reclusión, la interventora del Servicio Penitenciario Federal (SPF), María Laura Garrigós de Rébori, explicó cómo llegó el aparato ahí y adelantó que deberá reponer “inmediatamente” el equipo de uso común.
“En todos los pabellones hay teléfonos públicos puestos por la empresas Telecom y Telefónica que los internos utilizan con tarjetas para comunicarse con sus familiares, porque las personas detenidas no están incomunicadas”, aclaró la funcionaria nacional al periodista Alberto Lotuf en el programa A Diario (Radio 2).
Garrigós de Rébori señaló que la incomunicación se utiliza “al principio de las investigaciones y tiene que estar justificada” pero que esa prohibición no alcanza a las personas privadas de la libertad.
Sobre el teléfono público secuestrado en la celda de Guille Cantero, explicó que se trata de “un pabellón chico con las celdas abiertas durante el día, porque se cierran a la noche, y las personas circulan por adentro”.
“Los equipos no se amuran en la pared. Son teléfonos públicos como los que hay en los negocios que se pueden mover con cable largo. Como la celda de esta persona está justo enfrente del estante donde se apoya, lo más probable que haya corrido es que lo estaba utilizando adentro de la celda”, desarrolló.
Y abundó: “Es un pabellón donde hay pocas personas, no hay lugar donde sentarse (frente al teléfono) y la celda estará a un metro. La puerta está frente de la boca del aparato. Supongo que él lo estaría usando en ese momento (del allanamiento). No digo que sea normal, cuento cómo es la composición física del lugar”.
Sobre las suspicacias que, a su vez, genera el beneficio de ocupar ese lugar en el pabellón (entre otros posibles), la interventora aseguró que “la persona no elige la celda”. De todas formas, agregó, “aunque estuviera en otra celda, tendría acceso a ese teléfono igual”.
Garrigós de Rébori señaló que los presos “en otras prisiones usan el teléfono celular” pero en Marcos Paz no hay señal. Diferenció los pabellones grandes donde “hay más teléfonos” y los chicos donde suele existir un solo aparato
La funcionaria negó que el hallazgo del teléfono dentro de la celda del líder de la banda dedicada al narcotráfico, extorsión y balaceras sea una prueba de corrupción en el penal. Dijo que “si hubiera una connivencia con el Servicio Penitenciario el personal fácilmente le hubiera dicho «pone el teléfono en su lugar» (antes del allanamiento) y no lo hubieran encontrado”.
“No es un problema de corrupción del Servicio Penitenciario, no lo veo así”, dijo aunque aclaró que se inició un sumario por el tema y de allí surgirá si hubo “irregularidad”.
“En ese penal de máxima seguridad, hay más de 1.500 personas detenidas. Si algún juez decide intervenir ese teléfono público puede estar intervenido y se escuchará. Pero el Servicio Penitenciarios no puede hacer eso sin orden judicial”, afirmó y añadió que eso mismo rige para “el señor Cantero”.
“En este momento –continuó– no hay más teléfono en ese pabellón, lo que tengo que hacer inmediatamente es conseguir que la empresa telefónica coloque un teléfono nuevo porque si no voy a tener planteos por vía de habeas corpus por negar la comunicación a la personas de ese pabellón”.