La Unidad de Investigación y Juicio de Fiscalía investiga una denuncia presentada en la primera quincena de enero de 2020 por faltante de armas en Armería de la Jefatura de Policía de Rosario.
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó oficialmente este jueves que los funcionarios judiciales a cargo ordenaron auditorías a la Agencia de Investigación Criminal de Rosario.
El objetivo de las pesquisas es identificar si existió el faltante denunciado y recabar datos e información que sea de interés para la causa.
Por otra parte, la Agencia de Investigación Criminal de San Lorenzo y la Dirección de Delitos Complejos llevan adelante otra investigación sobre el desempeño policial en jurisdicción de San Lorenzo.
En este marco, y por orden del fiscal Matías Edery, se convocó este jueves a personal de la Dirección de Asuntos Internos a la URXVII, Jefatura de San Lorenzo, para realizar una serie de medidas de prueba.
Hasta ahora se conoció oficialmente que se esperan resultados de la convocatoria de la investigación para analizar los próximos pasos de la pesquisa.
Según adelantaron fuentes judiciales, en este caso es por irregularidades en el desempeño del personal policial aunque no se difundieron más detalles de las últimas investigaciones y allanamientos.
La intervención en San Lorenzo
La Unidad Regional de San Lorenzo fue intervenida el 18 de diciembre pasado por decisión del ministro de Seguridad de la provincia, Marcelo Saín, a instancias de un informe elevado por el jefe de la Policía provincial, Víctor Sarnaglia.
El documento que ordenó la intervención mencionaba que unos días antes habían sido detenidos e imputados en una causa por presunta complicidad con un narco, Esteban Lindor Alvarado, dos oficiales de San Lorenzo: Gustavo Spoletti y Cristian "Chamullo" Di Franco.
Ambos fueron imputados por los fiscales Edery y Luis Schiappa Pietra junto a otros dos policías.
Spoletti y Paz reportaban al jefe de la Unidad Regional de San Lorenzo, Gonzalo "Chino" Paz, quien tras las imputaciones pidió el pase a retiro, recordaron voceros del caso.
Los fiscales acusaron al ex jefe de Drogas Peligrosas Spoletti de falsear la venta de una vivienda –realizada en 2012 pero antedatada a 2010 y "sobrevaluada"– para justificar su patrimonio, el cual era investigado por Asuntos Internos de la Policía.
La investigación determinó que Spoletti le vendió una vivienda a Jorge Banegas, la mano derecha de Alvarado, presuntamente para justificar la construcción de otra donde residía el jefe policial.