La cuarentena obligatoria, sumamente necesaria para frenar el avance del coronavirus en la argentina, supone, en muchos casos, un doble esfuerzo para muchos. Y un verdadero drama, para mujeres víctimas de violencia de género que conviven con sus agresores, pero también para aquellas que lograron separarse pero sufren el acoso de sus ex parejas. Desde la organización Ampliando Derechos, señalaron una preocupante falta de atención y tacto de parte de la Policía y de la Justicia.
En los últimos días, la organización que encabeza Nora Giacometto recibió tres de casos de víctimas de violencia de género, ignoradas por la Policía y destratadas por la Justicia. Tal es del denominador común de sus denuncias.
Todas acusaron formalmente a sus parejas o ex parejas en las comisarías correspondientes, pero ninguna obtuvo la orden de restricción de acercamiento. Sólo una de ellas la tiene vigente: su agresor no puede acercársele a menos de 200 metros y sin embargo, vive a dos cuadras de distancia. Y lo que es peor, el viernes pasado irrumpió en su casa, la ahorcó y la amenazó con un cuchillo. El domingo –agregó– lo volvió a ver parado en su patio.
“Arreglate”, fue la respuesta en Tribunales que recibió una de estas mujeres, de acuerdo a su relato.
Desde Ampliando Derechos reclaman mayor intervención del Estado y protección para estas mujeres.