Las nueve vainas servidas que fueron secuestradas en la escena donde fue asesinado el taxista Héctor Raúl Figueroa (43 años) en la noche de este martes pertenecen al personal de la Policía de Santa Fe, ya que se pudo constatar que la culata de los cartuchos tenían la inscripción PSF, que provee el Estado provincial a los agentes. Fueron incautadas y serán enviadas a analizar por orden del fiscal Patricio Saldutti, a cargo de la causa.
Los disparos, según la investigación, fueron realizados por un sicario que, a pie, se puso al lado de la ventanilla de Figueroa, que estaba estacionado con un solo pasajero en el asiento delantero.
De acuerdo a los indicios recolectados por los investigadores policiales, al pasajero –que se intenta establecer si fue un “entregador”– se le salió una zapatilla, que quedó tirada a pocos metros del Fiat Cronos de la víctima.
En la causa se busca detectar dónde tomó pasaje Figueroa y el camino recorrido. El ministro de Seguridad Pablo Cococcioni afirmó este miércoles que el vehículo “pasó a diez cuadras del corredor seguro acordado” con las cámaras del sector.
Por ahora, la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo no corre con fuerza porque el morral con dos billeteras y el celular de la víctima fueron hallados en el Cronos.
