La investigación por el crimen del subinspector Leoncio Bermúdez (42 años), ocurrido el 14 de noviembre pasado en la puerta del hospital Provincial, tuvo un importante avance en los últimos días. Luego de haber quedado filmados haciendo campana y de ser allanados sus domicilios, dos adolescentes de 14 y 15 años se presentaron ante la Justicia de Menores. Por sus edades no son punibles y por ese motivo se dispuso que queden a disposición de la Secretaría de Niñez.
Los adolescentes prestaron declaración informativa ante el juez Estanislao Surraco, quien, apoyado en la legislación vigente, no puede formularles una imputación penal ni resolver sus detenciones debido a sus edades.
Por la evidencia recolectada por Gisela Paolicelli, la fiscal a cargo de la causa del homicidio de Bermúdez, no hay dudas de que los dos adolescentes participaron como "campanas" de quienes entraron a la guardia del Provincial para intentar rescatar al preso Gabriel Guillermo Lencina (29), quien está condenado por homicidio y aparece relacionado con el clan Romero que opera en la zona norte de Rosario.
“Al dolor se me sumó la bronca y la impotencia. No se puede hacer nada con ellos porque tienen 14 y 15 años. Son dos criaturas que participaron en un hecho aberrante y dejaron a mis hijas sin su padre. Tengo una impotencia muy grande”, dijo Romina, la viuda del subinspector Bermúdez, en diálogo con el programa De boca en boca (Radio 2).
Al momento del asesinato, el policía estaba en el destacamento del hospital acompañado por su hija de 12 años, una edad similar de quienes participaron en el ataque fatal.