El brutal femicidio de Melani Juárez conmocionó a la ciudad este martes por la mañana, pero fundamentalmente a su familia que la buscaba desde el fin de semana. Fueron su hermana Magalí y su mamá Patricia quienes la encontraron muerta en la habitación de la pensión en la que vivía en barrio Martin. El principal sospechoso es un joven que se fue abruptamente de la casona de 9 de Julio al 500 el domingo, el día después del crimen. Magalí contó que su hermana era acosada por esta persona y apuntó a un encubrimiento por parte del resto de los residentes.
“Hace dos meses, mes y medio, mi hermana me comentó que había un chico que la acosaba", contó Magalí Juárez, en contacto con el programa Radiópolis (Radio 2). Según llegó a comunicarle Melani, era un chico joven, más o menos de su misma edad (21 años), que vivía en la pensión hacía poco.
Este mismo chico es el que abandonó la pensión el domingo, un día después del crimen de Melani, a pesar de tener todo el mes pago. Es el mismo que Agustín Juárez, otro hermano de Melani, señaló como la persona que intentó sembrar la falsa versión de que Melani “se había ido con un chico en una chata”.
Magalí recordó que su hermana describió a esta persona como “medio loquito”. Se llama Matías y trabaja, como lo hacía Melani, para una aplicación de delivery.
“Quiero que se haga justicia”, reclamó Magalí y apuntó a los otros residentes de la pensión por encubrimiento. Señaló que la habitación en la que vivía su hermana era muy pequeña y que en la casona se escuchaba todo. Que la pieza estaba llena de sangre y que “se notaba que mi hermana se había defendido, se notaba que ella quiso salir”.
Para Magalí la ferocidad del femicidio y la resistencia de Melani tendrían que haber puesto en alerta a alguien; alguien tendría que haberla escuchado.
“Son autores porque nadie fue capaz de llamar a la policía ni salvarla, estuvo ahí un día y medio tirada en su cuarto, la apuñalaron por todos lados”, acusó.
