La madre y una hermana de Brandon Bay, el jefe preso de la banda narco Los Gorditos, fueron condenadas este martes a 5 años y 6 meses de prisión por comercialización de estupefacientes.
El fallo del Tribunal Oral Federal (TOF) N° 3, integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Martínez Ferrero y Germán Sutter Schneider, recayó sobre Érica Elena Altamirano y Aldana Jaquelina Bay, madre y hermana de Brandon, respectivamente. Ambas fueron halladas culpables del delito de tráfico de estupefaciente en modalidad de comercialización.
En el caso de Altamirano, el TOF 3 le unificó la pena por una condena anterior en la Justicia provincial a 7 años y medio de prisión, mientras que a Aldana Bay le dictó una condena única 6 años y seis meses, al unificarla con una a dos años que tenía en el fuero local. Actualmente, las mujeres se encuentran alojadas en la Unidad N° 5 de Rosario.
Fuentes de la Justicia Federal explicaron a Rosario3 que la causa tuvo su puntapié de agosto de 2016, a través de un informe realizado por la Sección de Inteligencia Zona Sur de ex Policía de Investigaciones (PDI), por medio del cual daban cuenta de varias bandas delictivas que operaban en inmediaciones de Flammarión y Lamadrid –Barrio Tiro Suizo–, las cuales se disputaban el territorio para vender estupefacientes, lo que provocaba gran cantidad de hechos de violencia en la zona.
En la investigación se señalaban varios domicilios que eran utilizados por estas bandas como lugares de acopio de armas, por lo cual se dispuso su allanamiento, entre ellos el del domicilio que habitaban las acusadas. Allí se secuestraron 1,2 kilo de marihuana, 30 y envoltorios de cocaína, además de una pistola semiautomática calibre 38, una carabina casera y municiones. Posteriomente, la banda fue objeto de otros allanamientos.
El 13 de diciembre de 2021, Giuliana Bay, otra de las hermanas de Brandon, fue detenida junto con su madre Erica Altamirano en su casa de Dinamarca al 555 bis. En ese lugar, se incautaron casi tres kilos de cocaína cuyos panes tenían el sello de una corona, dos kilos de marihuana, 952 mil pesos, 103 municiones calibre 9 milímetros; 80 municiones calibre .22 y 70 cartuchos de escopeta calibre 12/70.
Brandon Bay es sospechoso de liderar desde la cárcel federal de Marcos Paz una organización criminal que actúa con el aval del jefe de la banda Los Monos, Ariel "Guille" Cantero. En rigor, Brandon cumple una condena abreviada a diez años y 6 meses. Pero en su tiempo en prisión, tanto en cárceles provinciales como federales, sumó nuevas causas en las que se vieron involucrados varios de sus familiares.
Iniciada en el sector de Tiro Suizo conocido como Fuerte Apache, Los Gorditos se extendió en 2019 a San Lorenzo, de la mano de una "franquicia" de Los Monos. Según la investigación en la que Brandon Bay, sus familiares y otros miembros de la banda fueron imputados con prisión preventiva, con el aval de Cantero, los Gorditos disputaron en forma violenta el control territorial de la venta al menudeo de drogas con las organizaciones criminales ya establecidas en San Lorenzo, lideradas por Víctor "Willy" Velázquez y Ramón "Pipi" Leys.
Brandon, por esa incursión en San Lorenzo, fue imputado como instigador de los crímenes de Gerardo “Pecho” Pérez, Brian “Runi” Sánchez y de Rodrigo Gigena en Barrio Norte.
En tanto, en abril pasado, en un procedimiento abreviado fueron condenadas por el delito de asociación ilícita en la Justicia provincial otra hermana de Brandon, Giuliana Soledad Bay, de 26 años, y la “cadete” de la banda Mabel Aranda, de 39. La pena fue de tres años de prisión efectiva.
También en esa jornada se condenó al uniformado Axel Téliz por incumplir sus deberes de funcionario público por ser suboficial de Policía y ayudar a dos a dos integrantes de la banda para que recuperaran la libertad, en un recordado episodio que tuvo lugar en la comisaría 32ª.