Una decena de allanamientos en Rosario, Roldán y Puerto Gaboto culminaron este fin de semana con el secuestro de drogas, celulares, armas y una detenida. Según fuentes judiciales, las medidas apuntaron a esclarecer una serie de atentados que tuvieron como blanco la escuela Rosa Ziperovich, el Complejo Penitenciario de Rosario (de 27 de Febrero al 7800) y dos comisarías. Los ataques estuvieron acompañados de notas con amenazas a jefes y personal penitenciario por parte de internos de “alto perfil”.
Los voceros explicaron que, precisamente, en la cárcel de Piñero se registraron incidentes recientes con presos de los pabellones de alto perfil N° 25 y 28, cuyos familiares fueron requisados y suspendidos de visitar el penal. La sospecha de la Justicia apunta a que los atentados fueron una represalia por las requisas rigurosas que generaron descontento en un sector carcelario.
Así las cosas, la fiscal Valeria Haurigot delegó a personal de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), de la Agencia de Control Policial (ACP) y grupos tácticos allanamientos en domicilios de Felipe Moré al 600 bis, 9 de Julio al 4000; Matienzo al 400; Olavarría al 1200, Paraguay al 500 de Roldán y Almagro al 500 de Puerto Gaboto.
Las fuerzas policiales secuestraron una pistola 9 milímetros; 21 celulares, 14.5 kilos de ladrillos de marihuana prensada (incautados en Matienzo al 400); bochitas de cocaína, 500 mil pesos y documentación de interés, enumeraron voceros de la AIC.
El foco de las medidas, indicaron las fuentes, estuvo en domicilios y aguantaderos ligados a Francisco “Fran” Riquelme, detenido desde 2019 y considerado jefe de una asociación ilícita que opera en los barrios Empalme Graneros e Industrial, y ligado al capo mafia Esteban Alvarado. En las últimas horas, Riquelme fue trasladado a un penal de la provincia de Buenos Aires, indicaron a Rosario3.
Ataques con la firma de los "alto perfil"
En la escuela Rosa Ziperovich, atacada el martes 23 de mayo, los atacantes dejaron una amenaza al director, subdirector y subalcaide de la cárcel de Piñero. El 29 de mayo, entre las 19 y las 20, hubo disparos frente al complejo penitenciario de 27 de Febrero al 7800 y frente a la seccional 16ª de Ayacucho al 3350. Otra vez, los tiratiros dejaron notas con amenazas a jefes penitenciarios de Piñero. Y al día siguiente, atentaron contra la comisaría 20ª de Carrasco al 5600. La nota hallada, otra vez, pedía: “Dejen de verduguiar a la familia de los alto perfil”.
Paralelo a ello la semana pasada se registraron conflictos dentro del penal con el pabellón 28, catalogado de “conflictivo” precisamente con los internos Riquelme y Alejandro Núñez alias Chucky Monedita “debido a diversas situaciones ocurridas con sus familiares” a principios de abril, indicaron investigadores. En concreto, dos visitas de estos internos fueron suspendidas por querer ingresar elementos prohibidos al penal que fueron detectados por el escáner corporal.
“Teniendo en cuenta todo este contexto, surge probable que los hechos investigados hayan sido instigados por internos del Pabellón 28 en particular por Riquelme y por Alejandro Núñez”, indicaron fuentes de la investigación.
En los allanamientos, fue detenida Flavia Argañaraz, quien quedó ligada a los 14 kilos de marihuana incautados en Matienzo al 400. La mujer era visita de Riquelme en carácter de “concubina” y en abril había intentado ingresar un bulto que fue detectado en el escáner, por lo que había sido suspendida por 60 días por las autoridades de la cárcel de Piñero.