Un mecánico de 46 años, testigo con custodia policial de una causa contra Esteban Lindor Alvarado, fue asesinado a balazos este lunes a la tarde en la zona de Garay y San Nicolás. Fue baleado por sujetos que se movilizaban en un auto que fue localizado y luego secuestrado.
De acuerdo a testigos habrían sido entre dos y tres hombres y una mujer que circulaban en un auto rojo quienes tiraron y escaparon.
El hombre herido de bala fue derivado de urgencia al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) donde estuvo gravísimo, con heridas de bala en el cráneo y glúteo, y minutos antes de las 19 se confirmó su fallecimiento.
Por el crimen, fueron detenidas cuatro personas con un explosivo de tipo molotov tras una persecución policial. Se investiga si era para prenderle fuego el auto del hombre asesinado.
Además, en el procedimiento policial fue hallado el auto que habrían usado para el ataque. De acuerdo a fuentes policiales, estaría a nombre de una persona de otra ciudad del oeste provincial y no tenía pedido de secuestro por robo.
La víctima
El mismo sujeto ya había sido atacado a balazos en enero pasado en barrio Triángulo luego de haber declarado contra Alvarado sindicado líder de una organización narco criminal para quien la víctima había trabajado. Se trata de Carlos Argüelles, acusado por los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra de ser testaferro de Esteban Lindor Alvarado. También fue imputado por "ponchar" autos para la organización. También lo habían intentado matar en octubre de 2020. Luego de declarar en contra de quien había sido ladero, accedió a una morigeración de prisión preventiva que le permitió desde 2019 circular en libertad. Por el ataque a balazos de enero, tres personas fueron imputadas: uno de los sospechosos quedó preso y los otros dos en libertad bajo reglas de conducta. Esteban Lindor Alvarado es, desde noviembre de 2018, uno de los nombres más mencionados en las páginas policiales y judiciales de Rosario. Cayó en Embalse Río Tercero por estar sospechado de planificar el asesinato del prestamista Lucio Maldonado y desde entonces sumó acusaciones por asociación ilícita en la justicia provincial y por narcotráfico en el fuero federal. En abril del año pasado, se comunicó con Radiópolis (Radio 2) y dijo que su fuerte económico actualmente es "la venta de sábanas y acolchados".
Argüelles tenía custodia fija en la casa, pero no en el taller donde este lunes fue atacado. Si bien pidió acogerse a la figura de arrepentido, no aceptó el nivel de protección que ofrecía el programa provincial que hubiese implicado salir de la ciudad. Sí había aceptado un patrullero en su vivienda particular. 
