Aunque menor, un nuevo episodio de inseguridad golpeó a la familia de Julio Cabal, el joven santafesino asesinado este martes cuando atendía la fiambrería familiar. Le robaron las ruedas del auto a uno de sus tíos, que había viajado desde Reconquista para el velorio.
“Esto es un hecho menor, pero es una locura. No se puede vivir más así”, dijo Gustavo Cabal indignado a los micrófonos de Radio EME.
El robo ocurrió este jueves por la madrugada, cuando el auto, un Ford Focus, estaba estacionado en Saavedra al 1300, en pleno macrocentro de la capital provincial.
Julio Cabal fue asesinado este martes al mediodía cuando atendía el local de su familia ubicado en el microcentro de Santa Fe capital. Tenía 29 años, estudiaba Psicología, jugaba al rugby y tocaba la guitarra. El caso fue la gota que rebalsó el vaso, tras una seguidilla de delitos violentos que azotó a la capital santafesina en los últimos días. Y por eso, el ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro decidió la intervención de la Unidad Regional I por 30 días.
