Cuatro sospechosos fueron aprehendidos en 18 allanamientos que llevó a cabo la Policía de Investigaciones en la zona noroeste, un territorio en el que pisa fuerte la presunta banda conocida como "Los menores", mencionada en el doble crimen del jefe de la barra brava de Rosario Central Andrés "Pillín" Bracamonte y su ladero Daniel Raúl "Rana" Attardo, perpetrado el 9 de noviembre pasado. Fueron solicitados por el fiscal provincial César Pierantoni en una causa por microtráfico de drogas, quien además contó con la colaboración del fiscal Franco Carbone.
En los procedimientos se secuestraron armas, dinero y material estupefaciente. Se hicieron en Villa La Bombacha y los barrios 7 de Septiembre y Stella Maris en el marco del programa Intervención Barrial Focalizada (IBF) puesto en marcha por parte del gobierno provincial.
Las zonas allanadas fueron escenarios de varios episodios de violencia en los últimos dos años.
Los principales cabecillas de Los Menores están prófugos. Se trata de L. D. C., alias "Licha" o “Limón”, y Matías Gazzani, la cara más visible de la estructura que, de acuerdo a lo que se pudo constatar en distintas investigaciones judiciales, creció mucho desde el año pasado.
El propio "Pillín" Bracamonte había mencionado a la banda de Los Menores en una entrevista que le dio al periodista Germán de los Santos para La Nación. Allí, el asesinado jefe de la barra brava de Rosario Central los citaba como uno de los grupos emergentes que intentaban desplazarlo del paraavalanchas canalla.
"Los Menores se quieren quedar con parte de la ciudad", señaló Bracamonte en esa nota. Y luego vaticinó: "Si me matan, la ciudad se incendia". Y precisó: "Me quisieron matar 29 veces, esas son las cicatrices que tengo en el cuerpo". A partir de esa declaración, la posible autoría de esta banda del crimen de "Pillín" pasó a ser una de las principales hipótesis. Pero vale remarcar que no es la única que está siguiendo la Justicia.
Es difícil explicar cómo está constituida la banda. Funciona como una suerte de red de alianzas con actores que integran facciones de Los Monos, como Leandro Vilches y Pablo Camino, pero también se menciona en los últimos meses un acuerdo con un interlocutor de alto vuelo dentro del clan Alvarado y del clan Riquelme. Dentro de su organigrama criminal también asoma Mauricio “Mauri” Ayala, también prófugo hace meses y mencionado por haberle pagado a agentes policiales en febrero pasado para que plantaran armas al chofer de un integrante del clan Tripi –que vende al menudeo en el complejo Fonavi Parque Oeste– para incriminarlo en atentados donde se dejaron carteles contra autoridades del Ejecutivo provincial y nacional.
La presunta organización fue mencionada por Rosario3 en septiembre del año pasado por un caso resonante: un joven se negó a seguir vendiendo droga para la banda, fue secuestrado y llevado al lado del arroyo Ludueña, donde se tiró al agua para salvarse de los tiros.
La víctima, luego de escapar, se dirigió a la subcomisaría 21ª de Ayala Gauna al 7900 para denunciar lo que le había pasado. Sin embargo, allí se encontró con Fernando Molina, un oficial de policía que él reconoció como uno de los agentes que pasaba a cobrar coimas por los búnkeres para dejarlos vender estupefacientes.
En ese legajo que fue trabajado en conjunto entre la Justicia provincial y federal habían sido apuntados Matías G. y Ezequiel D. como los “terratenientes” de Los Menores, bajo las órdenes de “Limón” y Matías Gazzani, quienes se cree que dan las instrucciones desde Buenos Aires.