La separación de Mauro Icardi y Wanda Nara sigue sumando capítulos: denuncias, desalojos, chats y audios compartidos en redes sociales y ahora, un ida y vuelta entre el futbolista y L- Gante, actual pareja de la conductora.
“Todo bien, todo tranquilo. Recién me habían preguntado sobre unos estados que publiqué en Facebook, son altas y bajas que puedo tener cuando me pongo a pensar en la noche, pero mi vida transcurre normal”, dijo Valenzuela al ser consultado por cómo se siente él en medio del escándalo.
"Mi vida en el día a día es una película, es muy complicado todo. Las cosas que para uno pueden ser normales, para mí son un quilombo. Cambié mucho el afecto hacia algunas personas, mi círculo. Me convertí en alguien más desconfiado de todo porque hay gente que me persigue en lo judicial”, detalló y agregó: “Se hizo costumbre ir a lo judicial y la verdad es que yo no me puedo dormir pensando si es verdad lo que están diciendo en la tele o si me van a meter preso mañana, me está volviendo loco”.
Mauro Szeta, periodista de policiales y uno de los panelistas del programa de Vero Lozano, le consultó sobre la preocupación que tiene Icardi por la influencia que él puede tener en sus hijas. Y el músico no tuvo dudas en responder. “Me parece muy feo que se digan cosas así. Por un lado, porque yo no estoy fumando más y por el otro, porque si yo estuviera en el lugar de él, me sentiría deshonesto conmigo mismo. Es más fácil decir «esta mujer no me da bola» y no echarme la culpa a mí", dijo.
“Con Wanda estamos bien, ahora seguro la veo”, indicó en relación a su noviazgo y aclaró: “Con ella arrancó el amor hace un año, pero desde que la conozco son tres años. El primer beso fue hace un año y medio, dos años. Sé que se habló mucho de eso, pero son chistes que hago yo”.