Este viernes a las 22, en Nómade Espacio Cultural, Ovidio Lagos 68 bis, El Egotismo de Nildo presenta su primer disco. La banda cordobesa Surikata Ki oficiará de banda invitada
El álbum en cuestión es el (casi) homónimo El Egotismo de Nildo el Suspirante, una placa de once canciones en las que rock, reggae, ska y música electrónica (de pista) encuentran una amalgama sonora a partir de dos elementos comunes: sintentizadores y largos pasajes instrumentales.
“Hacemos rock moderno”, explicó Dante Scarpone a Rosario3.com. El cantante, letrista y pianista de formación. Y para el instrumentista de este quinteto sin bajo, la clave está en el uso que hacen de los sintetizadores: “No sólo en lo musical sino también en los efectos.”
El grupo se gestó en Funes, a partir de la amistad entre los músicos que lo integran, debutó en 2013 y, tras ese primer show, emprendió una gira por ciudades de Santa Fe, Córdoba y Mendoza, y también de Uruguay.
Bruno Signorelli, que comparte teclados con Dante; Rodrigo Casim, en batería; Matias Greco, en guitarra; y Matías Monestés, en percusión, integran la Formación de El Egotismo. ¿Pero quién es Nildo?
“Hay dos versiones –sostuvo Scarpone–. Una es la poética y es sobre una persona que conocemos nosotros cinco y que también habla de nosotros.”
Y una segunda –que entronca con la primera–, remite más al código que surge entre amigos que se conocen desde hace tiempo y que utilizan cierto “lenguaje” para comunicarse.
“Excepto egotismo, que salió del diccionario”, contó el vocalista.
Con influencias reconocidas que van de Radiohead a Sumo, pasando por Pink Floyd, el entrevistado reveló que las apetencias musicales variopintas de los integrantes ayudaron a enriquecer al grupo.
Para más datos, Dante Scarpone viene del jazz y la música clásica, Bruno Signorelli es productor e integra un dúo de música electrónica, y Rodrigo Casim “es del palo del rock nacional”, un camino que comparte con Matías Greco.
Rock cotidiano, problemas comunes
A mediados de 2014, el grupo comenzó con las grabaciones de El egotismo de Nildo el Suspirante, que editó recientemente el sello rosarino Rompe.
Los once temas del álbum respetan las estructuras esperadas para una canción: estrofas, estribillos y todo eso. Pero, al mismo tiempo, la banda se permite largos pasajes sin letra.
“Es que somos mayormente instrumentistas y la banda se siente cómoda en esos espacios (…) Creemos que la música dice lo que no dicen las letras. Y las letras dicen lo que no se escucha en la música”, afirmó Scarpone.
En tanto que a la hora de hablar de las letras que firma, el cantante señaló: “Hablan de los problemas cotidianos que tiene el ser humano medio, pero tampoco se trata del fin del mundo.”
