Hace casi dos años Alfredo Casero estaba al borde de la muerte por una infección que le causó un virus intrahospitalario. “Casi me cago muriendo”, recuerda hoy y asegura que eso le cambió la vida. “Lo que pasa es que uno se encuentra con nuevas cosas después. Llegás a pensar qué es lo que no hice, lo que realmente tengo que terminar. Y me dejó como secuela este show”, dijo el humorista en diálogo con el programa A diario, que conduce Alberto Lotuf en Radio 2, antes de presentar en Rosario, el viernes 22 de marzo a las 21.30 en el teatro Broadway, su nuevo espectáculo de monólogos y canciones.
Casero volvió a cuestionar al kirchnerismo y renovó sus ataques contra Roberto Lavagna y Marcelo Tinelli, de quien dijo que “puede ser presidente, pero de Titantes en el Ring”.
“Yo hablo de política sólo cuando me preguntan”, aclaró. Y recordó lo que le costó ser crítico del poder durante el kirchnerismo.
“Hace seis años que me puse de punta con el gobierno de Porota. Ya van seis años. Empecé en el 2013 y lo perdí todo. Me quedé sin trabajo por miedo de los demás”, afirmó.
También recordó que sufrió escraches pero aclaró que hoy no tiene problemas: “A veces viene a verme algún amigo de Brancatelli. Pero la pasan mal porque yo como cómico soy bastante hijo de puta”.
Sobre la reunión de Lavagna con Tinelli, se quedó de que traten al conductor de ShowMatch “como si fuera Churchill”.
“Tinelli podría ser presidente, pero de Titanes en el ring”, enfatizó.