Desde el Servicio Penitenciario de Santa Fe informaron que este fin de semana en la cárcel de Piñero, realizaron las habituales requisas a familiares que iban a visitar a internos para evitar que ingrese cualquier tipo de elemento no permitido.
La repartición provincial detalló que en uno de los casos, se registró que intentaron ingresar un teléfono celular escondido en la suela de una zapatilla.
Este tipo de situaciones, no son nuevas. Según detalló el periodista del Tres Hernán Funes, en oportunidades anteriores, se ha detectado que intentaron ingresar, por ejemplo, pastillas escondidas en un desodorante a bolilla.
En tanto, el secretario de Asuntos Penitenciarios, Juan Manuel Martinez Saliba, recordó que existe una disputa judicial para poder limitar la cantidad de kilos de comida que cada uno de los familiares puede llevar a los internos.
“Es necesario poder contar con esa herramienta para tener un mayor control del ingreso de elemento y agilizar las requisas para que los internos puedan estar más tiempo con sus familiares”, afirmó el funcionario.