El director de una escuela de la localidad de Las Heras, en Mendoza, se vio envuelto en un escándalo, cuando lo descubrieron junto a cinco alumnas en una cabaña.
El grupo de adolescentes no había podido realizar su viaje de egresadas y, en lugar de eso, planeó una semana de descanso en una cabaña de El Carrizal, que alquilaron. Un día después se sumó Marcelo Merenda, el director de la escuela, que no se presentó a trabajar ese día en el colegio argumentando “razones personales”.
Pero un padre descubrió la verdad. Fue hasta la cabaña para ver cómo estaba su hija y las compañeras y encontró a las chicas y al director adentro de la pileta. Se llevó a su hija a los gritos.
Al otro día Merenda fue a trabajar como si nada a la escuela Florencio Molina Campos. Y el padre lo denunció.
Merenda es profesor de Historia y hace 10 años ingresó a trabajar en la institución, en la cual asumió como director suplente los últimos dos. Tras la acusación de la familia de la alumna, lo separaron de su cargo.
