El Laboratorio de Biotecnología Acuática constituye el Area de Investigación Científica y Tecnológica del “Acuario del Río Paraná” en una iniciativa conjunta entre la Facultad de Ciencias Bioquímicas y Farmacéuticas de la Universidad Nacional de Rosario y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva del Gobierno de Santa Fe, conformada por miembros de ambas instituciones y del Conicet, según publica el sitio de la UNR.
Este laboratorio especializado mixto fue creado en octubre de 2014 por resolución del Consejo Directivo de la Facultad y funciona en el edificio del Acuario desde el mes de febrero de 2017. Actualmente trabajan investigadores de la UNR y del Conicet, becarios doctorales y postdoctorales y estudiantes universitarios.
Tiene como objetivos la generación y divulgación de conocimiento científico, la capacitación y formación de recursos humanos, el desarrollo de tecnología, la prestación de servicios tecnológicos, y la realización de proyectos de extensión a la comunidad y de divulgación científica en torno a los recursos acuáticos del río Paraná.
Códigos de barra genético
El equipo formado por bioquímicos, licenciados en biotecnología y licenciados en biología confeccionó una biblioteca de códigos de barra genético de las especies que habitan el Paraná. Este sistema permite identificarlos aunque los peces no puedan verse completos, por ejemplo, con una parte o un huevo de los mismos. En esta tarea descubrieron que hay más de una especie de morenas y de rayas.
En esta zona, que corresponde al pre delta, hay descripciones de 170 especies de peces aunque el número real es mayor. De ellas, las únicas que la gente identifica son las que se comercializan para consumo por lo que hay un gran desconocimiento de la diversidad, qué características tienen, sus ciclos de vida. "Saber reconocerlas, cuándo pescar o no, y por qué razón, puede contribuir a la conservación", afirmó la directora del Laboratorio, Silvia Arranz.
Teniendo en cuenta que el Paraná no es traslúcido y es imposible ver las especies que se ocultan en él, el Acuario contará con exposiciones y pantallas interactivas para que la gente pueda reconocer los peces, ver su comportamiento, tomar conciencia de lo perjudicial de la contaminación; en definitiva, apropiarse de este recurso natural. También se podrá observar a los investigadores ya que el laboratorio contará con grandes ventanales para socializar el trabajo científico.