La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) comunicó este martes que, luego de su procesamiento en la causa llamada “Cuadernos de las coimas”, el presidente de la entidad, Alberto Padoán, decidió tomarse medio año de licencia. A su vez, el dirigente expresó “la absoluta convicción de su inocencia”.
Un comunicado de la BCR señala que Padoán “ha solicitado una licencia por un plazo de seis meses con motivo de que el juez Claudio Bonadio dispuso su procesamiento sin prisión preventiva en la causa que es de público conocimiento”.
Y agrega que, en su texto, el titular de la Bolsa “ha manifestado la absoluta convicción de su inocencia y que la resolución que lo afecta es contraria a derecho, habiendo instruido a sus abogados para que interpongan recurso de apelación contra la misma”.
La Mesa Ejecutiva de la entidad rosarina, en reunión ordinaria, consideró el pedido formulado y, “atento a las razones invocadas, dispuso otorgar la licencia solicitada”. Además, “en virtud de las disposiciones estatutarias” se resolvió que durante dicho plazo pase a desempeñarse en la presidencia el vicepresidente 1°, Raúl Meroi.
El procesamiento
Bonadio procesó este martes a Padoán en el marco de la investigación de datos contenidos en las fotocopias de los cuadernos del chofer del kirchnerismo Oscar Centeno. El juez federal además le aplicó al empresario rosarino un embargo por $4.000 millones.
Padoán aparece en la resolución judicial como miembro de una asociación ilícita y señalado en dos hechos de dádivas en calidad de autor.
El dirigente había sido citado a indagatoria el pasado 18 de octubre, pero se negó a responder preguntas. Sólo presentó un escrito con el que buscó despegarse de la investigación sobre aportes de empresarios a funcionarios del gobierno anterior.
En septiembre último, en diálogo con Telenoche (El Tres), Padoán había admitido un vínculo con el ex ministro de Planificación Julio De Vido, pero negó haber hecho negocios con él.
Los otros procesados
El embargo de $4.000 millones también se le aplicó a Abal Medina y otros procesados entre quienes se encuentran Alberto Padoán y Rubén Aranda. En tanto, Claudio de Lassaletta fue procesado pero le trabaron un embargo por una cifra menor.
El procesamiento recayó además, sobre Paolo Rocca, CEO de Techint y uno de los empresarios más importantes de la Argentina, fue procesado por el juez federal Claudio Bonadio en la causa iniciada por los cuadernos del chofer Oscar Centeno.