Por el llamado de un vecino, este viernes a la tarde detuvieron a un taxista que dio positivo en el test de narcolemia por consumo de marihuana. El procedimiento se realizó en Necochea y Pellegrini y se trata del segundo caso registrado en un conductor de un servicio público desde que se implementaron los controles a principios de este año.
El resposable del Centro Integrado de Operaciones de Francia al 1800, Pedro Zizzamia, contó al programa Telenoche (El Tres) que una persona llamó este viernes a las 13.50 al teléfono 147 para contar que el conductor de un taxi estaba fumando un cigarrillo similar a un porro de marihuana.
Los funcionarios municipales iniciaron un procedimiento que consistió en rastrear el número de chapa de taxi por el sistema de GPS. Cuando detectaron la ubicación del coche, en Necochea y Pellegrini, los agentes de Tránsito lo detuvieron para hacerle el test de narcolemia con la pipeta específica.
“El chofer no se resistió y se sometió al control. Dio positivo en el análisis de consumo de cannabis. Inmediatamente la grúa retiro el vehículo y lo llevó al corralón”, contó Zizzamia. El funcionario añadió que la chapa quedó en caución y a partir de ahora comienzan los procedimientos legales.
“El juez de falta definirá cómo se procede pero inmediatamente se le retiró el carnet profesional de conducir”, agregó.
El de este viernes es el segundo caso positivo en un test de narcolemia en un conductor de servicios públicos. El 23 de abril pasado, un joven taxista fue interceptado en plena jornada laboral tras la denuncia de un pasajero y también dio positivo por consumo de marihuana y cocaína.
En aquella oportunidad, el titular del Sindicato de Peones de Taxis, Horacio Boix, se mostró a favor de los controles de narcolemia a los taxistas y consideró que deben ser rigurosos y cotidianos. Sin embargo, opinó que la sanción de quitarle de por vida la habilitación para conducir transportes públicos es extrema y pidió que a este tipo de choferes se le brinde una “segunda oportunidad”.
