En el marco del Pre Foro de Educación, organizado por Educar 2050 y la Bolsa de Comercio de Rosario, que se llevó a cabo el 28 de mayo en Rosario, diferentes actores del ámbito de la educación se reunieron para analizar las necesidades actuales de estudiantes y de escuelas e indagar acerca de cómo innovar tanto en el sistema educativo como dentro del aula.
Bajo el lema “Los aprendizajes: cambios en el sistema y en el aula”, la mesa conformada por Guillermina Tiramonti, FLACSO; Cora Steinberg, UNICEF y Lucas Delgado, EduLab/CIPPEC, analizó cómo las herramientas tecnológicas y la innovación pedagógica irrumpen en el escenario escolar y se presentan como una oportunidad para transformar la realidad educativa.
Dialogamos con Lucas Delgado, coordinador de Educación de CIPPEC, una organización sin fines de lucro que produce conocimiento para construir mejores políticas públicas, quien brindó detalles de los temas que se abordaron en el panel y analizó diferentes aspectos de la educación actual.
De abajo hacia arriba
“Este tipo de paneles apuntan a debatir y analizar qué cambios son necesarios, qué errores no deberíamos volver a cometer y cuáles son las deudas que aún existen en materia de transformación educativa”, expresó Delgado y destacó: “Es importante diferenciar cuáles son las problemáticas más urgentes por atender y desde CIPPEC vemos que actualmente la cuestión docente y de financiamiento de la educación, son dos aspectos que requieren atención”, expresó Delgado.
Respecto a cómo realizar la transformación educativa, el coordinador de CIPPEC aportó otra mirada que incluye a todos los actores: “Más allá de los cambios sistémicos que deben hacerse y más allá de las políticas que son necesarias, debe existir cierto empuje desde abajo hacia arriba, en términos de que si no pasa nada en las escuelas es muy difícil que el Estado pueda tomar ciertas prácticas que son propias de las instituciones educativas”.
Consenso e institucionalización
El año pasado CIPPEC presentó el libro “50 innovaciones educativas para escuelas”, con la intención de analizar cómo se instalan y materializan en la práctica de las aulas: “Efectivamente hay ciertas prácticas que pueden suceder en las aulas y que terminan de alterar los esquemas de aprendizajes de los alumno. Lo importante es ver si aparecen luego las políticas que las acompañen para poder sostenerlas en el tiempo”, explicó Delgado.
“Si no sucede esto, la innovación queda circunscripta a que el docente sea lo suficientemente activo y promotor de determinadas acciones. Luego el docente se va, y si eso no se institucionaliza de alguna manera, la innovación se pierde”, enfatizó el coordinador.
Por eso, destaca Delgado, “es importante que los cambios en innovación estén consensuados y articulados con todos los actores, tanto con los alumnos, como con los docentes, directivos hasta los supervisores y ministros” y dio un ejemplo: “Cuando hay un apoyo desde la política, como en el caso de Santa Fe o Salta donde se implementan las Tertulias Dialógicas Literarias, una propuesta que se trabaja en articulación con CIPPEC, te das cuenta cómo una práctica puede realmente escalar y sostenerse en el tiempo y luego son los propios alumnos la que la incorporan y aseguran su permanencia”.
Mirar y traducir
Consultado respecto a si es necesario transformar la escuela, Delgado sostiene que efectivamente la institución educativa, tal como se concibió a fines del siglo XIX, orientada a una cuestión industrial, es necesario modificarla y actualmente existen muchas iniciativas para resignificarla como lugar de formación, lugar de aprendizaje, sin embargo, destacó que “aún no estamos de acuerdo en cómo hacerlo”.
“El Ministerio de Educación está mirando hacia afuera; cómo son los métodos de enseñanza de Finlandia, en Singapur, pero en definitiva lo que estamos necesitando es una traducción de eso a nuestra realidad latinoamericana para que tengan sentido con nuestras sociedades”, expresó Delgado y continuó: “No está mal mirar hacia afuera pero siempre y cuando no nos olvidemos de diagnosticar bien qué está sucediendo en nuestra región y eso es algo de lo que carecemos”.
El coordinador de CIPPEC, sostiene que “No tenemos diagnósticos muy claros como para poder tomar las decisiones más adecuadas, en términos de políticas. Hemos avanzado mucho en Argentina en instalar una cultura de la evaluación en estos últimos años con las pruebas Aprender, pero aún faltan indicadores para entender cuál es el diagnóstico”.
La cuestión docente
Con respecto a la cuestión docente, que surge de los cuestionarios de las evaluaciones APRENDER, desde CIPPEC se observa una problemática que consideran urgente de atender: actualmente hay pocas provincias que han podido avanzar en una contratación de un docente por cargo.
“Es necesario contar con docentes que puedan tener tiempo no solo para estar frente a la clase sino para trabajar con sus colegas, para trabajar en el seguimiento de sus alumnos, para comprometerse más en la institución”, expresó Delgado y enfatizó que desde CIPPEC promueven que haya un cambio real en la carrera docente.
“Es uno de los componentes esenciales para que podamos establecer mejores políticas y mayores compromisos de diferentes sectores con los procesos de cambio en la educación”, concluyó.