Después de casi un mes de pericias y examenes, los 55 peritos oficiales y de parte que participaron de la autopsia de Santiago Maldonado confirmaron que el joven tatuador murió ahogado y estuvo 70 días en el agua. Además, coincidieron en que el muchacho no fue arrastrado ni manipulado y descartaron heridas contusas, cortantes o penetrantes.
Según publicó La Nación, que tuvo acceso al informe pericial de 64 fojas, Maldonado falleció por asfixia por sumersión y no fue arrastrado, lo que descartaría las sospechas de la familia de que el cuerpo hubiera sido plantado en el lugar donde fue hallado.
"Del examen externo e interno del cuerpo no se han constado signos compatibles con arrastre" ni "con medidas de sujeción", dice el informe. Tampoco en su ropa hay señales de ello.
Además, de acuerdo a información preliminar de otros tres estudios complementarios, cuyos resultados oficiales se conocerán el 24 de noviembre, el cuerpo permaneció "más de 70 días en el agua". Encontraron diatomeas (microalgas) en sus pulmones, cavidades cardíacas y médula ósea del fémur derecho que coinciden con aquellas que existían en el área donde fue encontrado el cadáver.
También detectaron polen y las esporas en su vestimenta y calzados.