“Si nuestras vidas no valen, produzcan sin nosotras” es el lema de la convocatoria al Paro Internacional de Mujeres previsto para el próximo 8 de marzo. Este llamado a huelga –el segundo a escala planetaria– es en repudio a todas las formas de violencia machista y en reclamo por el derecho a vivir libres de ellas.

Rosario celebró la primera asamblea feminista de cara a la huelga el último 22 de enero. Unas 300 mujeres, bisexuales, lesbianas, travestis y trans participaron del encuentro. Este lunes, el movimiento de mujeres celebra la segunda. La cita es a las 19 en el Centro Cultural de La Toma, Tucumán 1349. Dos horas antes, a las 17, y en el mismo lugar comenzará la reunión de comisiones: Organización y Finanzas, Sindicatos, Prensa y Cultura, Territorios, Documento y Articulación Internacional.

“Somos nosotras las que movemos al mundo de su eje, somos nosotras las que lo paramos”, se lee en el comunicado de Ni Una Menos Rosario. Desde la colectiva, convocan a participar de la asamblea feminista para “pensar cómo vamos a realizar el paro en nuestra ciudad”.

En paralelo, las organizaciones y movimientos de mujeres de medio centenar de países ya trabajan articuladamente de cara al Paro: El #8M #NosParamos #NosotrasParamos.

Por qué una huelga

La convocatoria al Paro se asienta en el repudio a las distintas formas que asumen (y reproducen) las violencias de género y cómo estas cristalizan en un acceso desigual al capital económico, simbólico, social y político. Se trata de asimetrías específicas que se refuerzan entre sí.

Un informe elaborado por el movimiento Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá) reveló que entre el 1 de enero 1 de enero y el 31 de diciembre del 2017 se registraron en Argentina un total 298 femicidios. El relevamiento se realizó a partir de la observación de medios gráficos y digitales de todo el país.

Entre esos 298 femicidios, hubo 16 vinculados de mujeres y niñas, y 21 vinculados de hombres y niños. A la cifra se suman 6 travesticidios.

También según el Registro Nacional de Femicidios de MuMaLá, en los primeros 15 días de este 2018 se contaron 15 femicidios. La tasa de casi uno por día se mantiene.

Femicidio, transfemicidio y travesticidio son la última expresión de las violencias machistas; la más extrema.

Otro dato: el 79 por ciento de las víctimas de trata de personas identificadas en América Latina en 2016 fueron mujeres y niñas.

La movilización avanzó por el centro de la ciudad.
Alan Monzón/Rosario3.com


La convocatoria al paro avanza también en el reclamo por el aborto seguro, legal y gratuito y por los derechos de las identidades sexuales disidentes (entre ellos, el acceso a empleos formales).

La feminización de la pobreza es un aspecto central en el andamiaje de la economía capitalista y patriarcal.

En Argentina, la brecha salarial –diferencia en la remuneración entre hombre y mujeres por el mismo trabajo y con igual capacitación– es del 27 por ciento, según datos del portal Economía feminista.

Ese margen “llega al 35 por ciento en los trabajos más precarios" y "un tercio de las trabajadoras está precarizada".

Según datos del citado portal, el promedio de horas semanales dedicadas al trabajo no remunerado (tareas domésticas, cuidados) –obtenidas entre diez países de América Latina– es de 13,72 horas en hombres y de 39,13 horas en mujeres.

Los datos arriba mencionados denuncian algunas de las violencias machistas cotidianas que impulsan la convocatoria al Paro Internacional  de Mujeres y el reclamo a vivir sin ellas.