Abrir una cerveza mientras te bañás puede tener consecuencias no deseadas como terminar llena de shampoo, en el mejor de los casos.
Pero, al menos en Suecia, la cerveza y la ducha pueden ir de la mano. La prueba es Shower Beer es el flamante resultado de la unión entre la agencia creativa Snask y la cervecería PangPang.
Se trata de una botella pequeña que se puede tomar en tres o cuatro tragos: son sólo 177 centímetros cúbicos. Para más datos, es una Pale Ale con un 10 por ciento de alcohol, de sabor cítrico y "algo jabonoso", según cuentan sus desarrolladores en el anuncio.
El otro dato es que la botella está confeccionada con cristal doble que la hace casi irrompible (por si se te resbala, ¿viste?)
La cerveza se comercializa a través de Internet y a un precio de 12 dólares la botella.