La práctica de tomar fotos por debajo de las polleras de las mujeres, llamado "upskirting", se convirtió en un delito sexual en Inglaterra y Gales. La medida fue aprobada este viernes por el gobierno británico. Estos hechos preven penas de hasta dos años de cárcel.
La diputada Wera Hobhouse, quien propuso al Parlamento británico el proyecto de ley demandado por el caso de una joven que atravesó un episodio de esas características, insistió este viernes en la importancia de que este tipo de actitudes no se tomen "como una broma" porque representan "un delito sexual".
La joven de 26 años Gina Martin es la responsable de que esta práctica vaya a considerarse un delito sancionable en la legislación, después de iniciar una campaña el pasado año.
Según relató a la cadena pública británica BBC, la joven estaba con su hermana esperando a que comenzara el concierto de la banda "The Killers" en el parque londinense de Hyde Park el verano del año pasado, cuando dos hombres se les acercaron y entablaron una conversación.
La joven relató que comenzaron a comportarse de manera extraña y luego se percató de que uno de ellos no solo le había tomado fotografías por debajo de la falda con su celular, sino que las estaba enviando por Internet.
"Sentí como que no tenía ningún tipo de control sobre mi cuerpo", relató la joven, antes de contar que advirtió a la Policía de lo que había ocurrido pero poco pudieron hacer porque, tal y como le adelantaron los agentes, existía un vacío legal para este tipo de supuestos.
Martin lo comprobó y, efectivamente, descubrió que esta práctica no estaba registrada como un delito específico en la ley inglesa, tampoco en la de Gales, y decidió emprender una campaña para que se penalizara y ese cometido se convirtió en ley este viernes.