El presidente Mauricio Macri anunció este lunes por la mañana una plan de reforma y reorganización del Sistema de Defensa Nacional. Las modificaciones se harán efectivas a través de dos decretos que se publicarán este martes en el Boletín Oficial; e incluyen la reubicación de cuarteles y la asignación de nuevos roles al Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea que comenzarán a colaborar con las fuerzas de seguridad. La reforma se da en medio del severo plan de ajuste que inició el gobierno para cumplir con las metas fiscales prometidas al Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Necesitamos que nuestras Fuerzas sean capaces de enfrentar los desafíos del siglo XXI”, enfatizó Macri este lunes por la mañana en un acto en Campo de Mayo. Habló de "ausencia de políticas a largo plazo", de "años de desinversión" y de un "despliegue territorial para amenazas antiguas".
"Queremos saldar la deuda con las Fuerzas Armadas de la democracia", sostuvo.
Ese plan de "modernización", como lo llamó, incluye fortalecer la presencia en la Antártida y "colaborar con la seguridad interior".
Anticipó, por otro lado, un "ley de personal militar" que permita sumar efectivos de ser necesario.
Así, se espera que el Jefe de Estado derogue el decreto 727/2006 de Néstor Kirchner que limitó el accionar de las Fuerzas Armadas frente a ataques de Estados extranjeros. Con el plan de reforma, las Fuerzas sumarán nuevas funciones, entre ellas tareas de apoyo logístico a las fuerzas de seguridad.
De acuerdo a lo publicado por La Nación, el 1° de agosto llegará a poblaciones vulnerables, principalmente de Salta, Formosa y Misiones, el primer refuerzo de 500 efectivos del Ejército, que se sumarán al programa Escudo Norte, cuya ejecución está en manos de las fuerzas de seguridad.
El plan global comprende además la posible fusión de bases militares para fortalecer el despliegue en zonas críticas y dejar sin efecto posiciones que hoy carecen de sentido.