En el marco de Semana Santa, el Instituto del Alimento, dependiente de la Secretaría de Salud Pública municipal, brindó una serie de recomendaciones a la hora de consumir, comprar, almacenar y elaborar productos típicos durante el fin de semana largo próximo a fin de prevenir problemas de salud derivados de su ingesta.
En caso de comprar latas de conserva de productos pesqueros, al igual que otros enlatados, no deben presentar abolladuras, ni estar hinchadas u oxidadas. Asimismo, se recomienda verificar los rótulos, procedencia y fecha de vencimiento. De forma similar, si se adquieren productos deshidratados, huevos de Pascua o roscas es esencial que sea en comercios habilitados y verificar la presencia del rótulo.
En caso de consumir pescados o derivados es de suma importancia comprarlos en comercios habilitados y no en la vía pública. Los productos tienen que estar debidamente registrados y autorizados mediante la exhibición del rótulo reglamentario.
Además, se debe tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
El pescado fresco debe tener las agallas de color rojo brillante, las escamas bien adheridas al cuerpo y brillantes, y su carne debe ser firme, que no ceda a la presión del dedo.
Los ojos del pescado fresco entero deben ser brillantes. La presencia de opacidad o hundimiento de los mismos es índice de deterioro.
El pescado fresco podrá conservarse de 1 a 2 días en heladera (en la parte más fría), y hasta tres meses en freezer.
Los productos congelados deben conservarse en freezers (–18ºC). Si esto no es una posibilidad, guardarlos en el congelador y consumirlos en el día.
Evitar descongelar y volver a congelar los pescados y mariscos. Los mismos se deben descongelar en la heladera o microondas, nunca a temperatura ambiente, y una vez preparados, consumirlos lo antes posible.
En ningún caso se debe cortar la cadena de frío.