Un remisero jubilado fue asesinado en la localidad bonaerense de San Justo por ladrones que quisieron robarle el auto pero no pudieron arrancarlo. “No sabés manejar, pibe. Bajate, estúpido”, le dijo Ricardo Almeida al ladrón que intentaba llevarse su vehículo. La respuesta fue un tiro en el pecho que le quitó la vida.
El sábado a la noche Ricardo Almeida volvía de una cena con su familia. Dejó a su esposa y a su nieta de nueve años en la puerta de su casa en la localidad bonaerense de San Justo y siguió solo unos 50 metros para estacionar el auto en la cochera. En ese momento lo interceptaron dos motochorros.
"La nieta vio todo y está internada en estado de shock", contó esta mañana en TN su hijo, Germán. El joven estaba durmiendo cuando escuchó los gritos de su mamá, salió a la puerta y se encontró con por lo menos 30 vecinos que ya habían salido a la calle para tratar de ayudar al remisero de 65 años. "Lo quería todo el mundo", sostuvo el joven.