Quasimodo es un perro Pastor Alemán al que sus dueños rechazaron por una malformación genética: tiene una importante joroba. El animal había sido abandonado en la calle de Kentucky, Estados Unidos, y durante mucho tiempo sobrevivió gracias a los desechos de comida que encontraba a su paso.
Los años pasaron para “Quasi” ante la indiferencia y el desamor de la gente que no lo aceptaba por no cumplir con los “estándares” que debe tener una mascota.
Pero un día, la vida del vagabundo cambió cuando un miembro de la organización Secondhand Hounds –que rescata “perros de segunda mano” que padezcan enfermedades raras o necesidades especiales– lo sacó de las calles.
Los rescatistas que tienen el perro a su cargo indicaron que “Quasimodo tiene el síndrome de la columna rota que implica la falta de un par de vértebras, por lo que prácticamente no tiene cuello. Sin embargo, su cabeza y el resto de su cuerpo son de tamaño normal. En la actualidad, sólo se conocen trece casos de animales con la misma enfermedad en todo el mundo”.
Los especialistas también indicaron que pese a su malformación el animal no siente dolor y se puede mover y correr como cualquier otro de su especie.
Desde Secondhand Hounds abrieron un Facebook para que la gente se entere de la historia de Quasimodo que ya tiene más de 300 mil seguidores y cientos de personas interesadas en adoptarlo.