En la localidad de Centeno, ubicada en el departamento San Jerónimo y a unos 100 kilómetros de Rosario, hay gran preocupación por el posible cierre de la planta de producción de quesos de la firma Sancor. Allí trabajan 65 personas que viven esta situación con mucha angustia. El secretario de Lechería de Santa Fe, Pedro Morini, reconoció que “es una situación compleja porque la empresa está en un proceso de reestructuración” y anticipó que “los empleados serían reubicados en otras plantas cercanas”.
El posible cierre de la fábrica de Sancor de Centeno se suma al anuncio que hicieron desde la planta de La Serenísima en Rufino, que dejará de producir en julio: “Yo creo que es un tema complejo, la empresa va a tener una reestructuración y hay plantas que están en riesgo, que pueden cerrar”, confirmó Morini en contacto con el programa Radiópolis (Radio 2).
El funcionario admitió que “esto viene pasando, los empleados después se reubican, hay que ver qué plantas hay cerca de Centeno para que puedan ser reubicados”.
Y también explicó que “los empleados de mayor antigüedad tiene la posibilidad del retiro voluntario y la jubilación anticipada”.
El secretario provincial de Lechería también se refirió a la ayuda económica de 400 millones de pesos que aprobó la legislatura provincial para productores que han sufrido las consecuencias de las inundaciones en este verano: “Fue nuestro pedido la creación de este fondo y es una ayuda en un momento bastante difícil, porque hay que reponer pasturas y prepararse para el invierno”, dijo.
El funcionario describió que “si no pasaba lo de enero, íbamos a llegar a los 8 millones de litros diarios en la provincia, pero la inundación de enero nos hizo retroceder varios casilleros, estamos en 5 millones de litros. Para recuperarnos vamos a tener que esperar hasta julio del año que viene”.
Morini detalló que de los 400 millones aprobados “150 salen del gobierno provincial y 250 millones del nacional”.
“Son 400 millones de pesos con recursos provinciales y nacionales para dar ayuda financiera a los tambos afectados por las emergencia hídrica, y se otorgarán en promedio de 300 mil pesos por productor, con un año de gracia, tres años para devolverlo, tasa cero y un gasto de 3 % anual”, precisó.