Hay una leyenda que dice que comer fruta antes de ir a dormir hace mal. Lejos de ser un invento, se trata de algo cierto: la fruta es muy buena, pero se recomienda comerla durante el día.
La nutricionista Sara Abu Sabbah explicó que este alimento contiene vitaminas, fructosa, minerales y fibra y tiene bajo contenido calórico. ¿Y por qué hay que evitarla de noche? La creencia popular indica que si bien contiene azúcares de rápida absorción, en ese momento del día se gasta poca energía y eso que comiste se almacena en el organismo y te hace aumentar de peso.
“En verdad no importa que sea fruta u otro alimento: si a la noche te pasás de las calorías que vas a necesitar, subirás de peso”, aclaró Abu Sabbah al portal Salud 180 y no obstante recomendó comer de 3 a 5 unidades de fruta al día.
Sin embargo hay una razón clara por la que no deben consumir este alimento a la noche, al menos los diabéticos, y es que su alto contenido de fructuosa eleva los niveles de azúcar en sangre y puede ocasionar inconvenientes. También puede provocar indigestión.
El consejo es que si van a comer frutas tarde, que sea aquellas con bajo nivel glucémico como la pera, la manzana o la ciruela. Evitar en cambio aquellas demasiado ácidas como la naranja -puede ocasionar malestares gastrointestinales- o las que tienen demasiada azúcar como la banana, uva, sandía o melón.
“La clave está en cuánto comés de cada una”, resaltó la especialista y agregó que también hay frutos que contienen enzimas ayudan a procesar los alimentos. “Tal es el caso de la papaína de la papaya que facilita la digestión de las carnes”, apuntó.