Pablo Alejandro Espíndola, policía detenido por el ataque a la casa de Antonio Bonfatti, no regresó a la cárcel de Piñero tras recibir autorización judicial por salidas laborales. Actualmente, está en juicio de trámite escrito porque en su auto habían encontrado el arma utilizada para disparar contra el frente de la vivienda del ex gobernador.
Espíndola, que prestaba servicios en la comisaría 10ª, no volvió de la salida laboral del pasado lunes, según confirmaron desde el Ministerio de Seguridad. Antes, estuvo un tiempo en prisión domiciliaria, hasta que la Cámara le revocó ese beneficio. Su proceso judicial en trámite es por portación ilegal del arma encontrada, uso de documento falso y encubrimiento del atentado.
Eh su momento, el policía fue procesado por la jueza Alejandra Rodenas por la "presunta comisión del delito de encubrimiento agravado en calidad de autor".
Con diferente grado de participación, Espíndola es uno de los dos involucrados judicialmente en el ataque al ex titular del Poder Ejecutivo provincial. Por su parte, Emanuel "Ema Pimpi" Sandoval fue condenado a una pena de 3 años y medio de prisión por "organizar e instigar" el ataque.
La querella de Antonio Bonfatti, representada por su abogado Héctor Superti, desistió la acusación en su contra ya que entendió que no había "evidencia suficiente" para juzgarlo.