Este jueves por la mañana, en un operativo de Control Urbano en el que participaron policías, se desmontaron estructuras precarias sobre la barranca del río Paraná, a la altura de bulevar Oroño. Vecinos señalaban ese lugar como un “aguantadero” de cosas robadas en la zona. Efectivamente, allí se encontraron objetos que habrían sido sustraídos, pero no hubo detenidos. El secretario de Control y Convivencia Ciudadana, Gustavo Zignago, señaló el peligro que supone transitar por allí por la debilidad de las estructuras.
En las casillas se encontraron discos de corte, caños corrugado, arneses, rejas, que serían de una obra en construcción lindera. También se halló una motocicleta en estado de desguace.
Consultado por el periodista Pedro Levy del programa De 12 a 14 (El Tres), Zignago explicó que el operativo de este mediodía tenía que ver con la circulación de personas en una parte de la barranca que es inestable.
Dijo que, de acuerdo al seguimiento del personal de Control Urbano, en los últimos seis meses no se asentó allí ninguna persona pero que muchas transitan habitualmente por allí y permanecen “por minutos o por horas”. Así, descartó que haya gente que pernocte sobre la barranca.
Fuentes municipales informaron que esta es una investigación que viene llevando adelante la fiscal Verónica Caini, quien de acuerdo a datos recabados tiene la presunción de que son asentamientos relacionados a actividades delictivas, como arrebatos que suceden en la zona del Parque España.
En tanto, vecinos de la zona señalaron a El Tres que sospechan que la zona hace las veces de depósito de objetos robados.
Se rumoreaba que allí se alojaban pescadores y cuidacoches de la zona, pero esto fue desmentido por el municipio. “Hicimos intervenciones anteriores donde confirmamos que allí no vive nadie”, indicaron desde la secretaría de Control.
La intervención estuvo a cargo de la Municipalidad porque tiene que ver con la “ocupación indebida del espacio público y también por el peligro que representa construir en esa zona”, aclararon.