¿Asesinato y represalia? Un adolescente de 16 años fue asesinado este jueves por la noche en barrio Ludueña y horas más tarde la casa del principal sospechoso se prendió fuego. Los supuestos asesinos están prófugo y se desconoce si las llamas fueron provocadas por un tercero de forma intencional, pero todo parece indicar que fue una reacción por lo ocurrido.
Según precisó el fiscal de Homicidios Pablo Pinto, el adolescente, identificado como Kevin Nicolás Aguirre, murió de un balazo en la espalda el jueves alrededor de las 22. A esa hora lo sorprendió el disparo en la calle cuando andaba en moto con su primo, Michael P., de 18 años, por Humberto Primo y Felipe Moré.
"Una persona tuvo una discusión con Kevin, quien después se subió a la moto de su primo y se retiraron del lugar. El sujeto con quien discutió después le efectuó entre seis y siete disparos", precisó Pinto.
La policía encontró al adolescente tendido en el piso y a Michael todavía arriba de la moto. De acuerdo al relato del primo, una persona los atacó en esa esquina.
La muerte del joven fue confirmada en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), adonde ya llegó sin vida.
Sin embargo, esta trágica historia no terminó ahí. Horas más tarde, cerca de la 1.45 de la madrugada, Bomberos Zapadores fueron convocados a un incendio en una vivienda precaria de Humberto Primo al 2100. Vecinos señalaron que allí vivía uno de los sospechosos del homicidio.
El fiscal manifestó que tiene "dos nombres" como posibles autores del crimen y serían de la zona donde tuvo lugar el ataque. Además, adelantó que tanto el primo que iba en la moto con la víctima como otro testigo ampliarán su declaración testimonial en Fiscalía.