Mauricio Macri afirmó este miércoles que superados los "cortocircuitos" del pasado, la Argentina y España deben "encontrar juntos mejores oportunidades de progreso", y abogó por "cultivar el eje entre América del Sur y la Península Ibérica", al ofrecer un breve discurso antes de la cena que en su honor que ofrecieron los reyes de España en el Palacio Real de Madrid.
"Recuperando la confianza pudimos superar algunos cortocircuitos, y ahora tenemos que encontrar campos para juntos ofrecer mejores oportunidades de progreso para nuestros pueblos", dijo Macri.
En ese sentido, el mandatario destacó la importancia del acuerdo estratégico que firmará mañana con el presidente Mariano Rajoy, y celebró que ambos países "sigamos creyendo que la integración en el mundo es una oportunidad" cuando en otras partes soplan vientos proteccionistas.
El jefe de Estado argentino subrayó que "hay que cultivar el eje entre América del Sur y la Península Ibérica, avanzando en el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea".
Al darle la bienvenida, el rey Felipe VI aseguró que España "sigue con gran interés el proceso de transformación que vive la Argentina" y "reconoce y aplaude" los esfuerzos realizados por el presidente Macri.
El monarca sostuvo que España y Argentina "son socios y amigos en ámbitos amplios y decisivos, como la solidaridad y la estabilidad internacional, o el multilateralismo y la apertura de mercados", y su país continuará "abogando por estrechar la cooperación bilateral" en el marco de "una asociación estratégica privilegiada".
Además, subrayó que "España trabaja decididamente por la pronta conclusión del Acuerdo de Asociación entre la UE y el Mercosur", y brinda su apoyo tanto para la reunión ministerial de la OMC que se celebrará en Buenos Aires como a la Presidencia argentina del G20 en 2018".
Felipe VI recordó que su país sigue siendo el segundo mayor inversor en la Argentina y unas 300 empresas españolas contribuyen al desarrollo productivo del país en diferentes ámbitos con una "presencia consolidada y con vocación de permanencia y comprometida con el servicio a los ciudadanos argentinos".
Macri también destacó la importancia de las empresas españolas en la Argentina, que "aportaron mucho en décadas pasadas, sobrevivieron a las tormentas de los últimos tiempos y nos siguieron dando un ejemplo de bienes y servicios de calidad".
"Ahora espero que con la estabilidad macroeconómica y con reglas de juego claras, redoblen su entusiasmo para acompañarnos en el desarrollo y contagien a otras empresas, especialmente a las Pymes, para que vengan a asociarse y nos ayuden a ese primer objetivo por el que espero ser evaluado bien, que es el de reducir la pobreza y la exclusión", añadió.
Antes del dar paso al brindis, Macri dijo que trasladó al rey Felipe VI una invitación para que visite "lo antes posible" la Argentina porque con su presencia "va consolidar el proceso de crecimiento entre ambos países"; y el rey prometió devolver la visita de Estado, para luego pedir a los invitados que alcen sus copas para celebrar que ambos países quieren "seguir dando impulso a unas relaciones que "albergan un potencial ilimitado".
A la cena de honor asistieron casi todos los integrantes de la delegación argentina que acompaña al presidente, incluidos todos los ministros, el embajador de Argentina en España, Ramón Puerta, y empresarios como Alejandro Bulgheroni, Leandro Sigman, Hugo Sigman y Santiago Soldati.
La nota de color la dio la actriz y cantante Martina Stoessel, "Tini", quien rompió el protocolo besando a Macri y a la primera dama Juliana Awada.
Del lado español, además del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y varios de sus ministros, acudieron algunos representantes de la élite económica, entre ellos Isidre Fainé, presidente de Gas Natural, el presidente de la central empresaria CEOE, Joan Rosell, y de la cultura, como Nuria Espert, Premio Principe de Asturias a las Artes.