Médicos expertos en enfermedades infecciosas en Madrid y Barcelona han analizado los riesgos de la interacción entre sexo, drogas y enfermedades de transmisión sexual en el libro 99 preguntas clave sobre ChemSex, editado por GeSIDA.

Estas son las principales conclusiones:

¿Qué es el ChemSex?

Los expertos lo definen como la combinación de relaciones sexuales con el uso de determinadas drogas ilegales o sin receta con el fin de facilitar, potenciar o prolongar (a veces en sesiones de más de un día) el encuentro sexual.

¿Qué drogas usan?

Las más directamente vinculadas al ChemSex son la mefedrona (mefe), la metanfetamina (tina) y el GHB, que inciden directamente en la experiencia sexual y que muchas veces se consumen por vía intravenosa. Además se usan muchas como MDMA, popper, cocaína y fármacos para la disfunción eréctil: tadalifo y sineldafilo.

¿Hasta qué punto es algo nuevo?

Es nuevo el consumo de sustancias en forma de cóctel, la duración de las sesiones y el contacto de sus protagonistas por internet.

¿Cuándo y dónde empezó?

El uso sexualizado del mencionado cóctel de drogas se empieza a detectar hace una década, entre el colectivo de hombres que tienen sexo con hombres en EE UU. Llega a Europa a través del Reino Unido. 

¿Quién lo practica?

Varios estudios indican que en general más en los colectivos LGTBI. Y en concreto en hombres que tienen sexo con hombres. Entre el 29% y el 37% es VIH positivo.

¿Qué perfil tienen los consumidores?

Personas de buena posición social y profesional, alejados del prototipo de drogodependientes. Se han descrito factores emocionales ligados a la adicción.

 

¿Qué riesgos tiene el ChemSex?

Los inherentes a las propias drogas, los riesgos de descuidar la protección durante el sexo y las problemas que implica para el tratamiento antirretroviral en las personas con VIH positivo. En concreto, los contagios de VIH, de hepatitis y de dependencia a las drogas.

¿Qué deben de hacer los médicos?

La entrevista clínica es un contexto privilegiado para construir una relación de ayuda. Se pide que los médicos sean proactivos, con tacto y sin juzgar, y que aborden este tema. 

Fuente: 20minutos