El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, advirtió que la demanda de Buenos Aires por más fondos puede “poner en crisis al sistema”, luego de una reunión que mantuvo este miércoles con varios de sus pares para tratar ésa y otras cuestiones económicas de índole federal.
“Las discusiones sobre recursos son históricas en la Argentina, no es que se plantee solamente ahora. Pero esta demanda de Buenos Aires pone en crisis el sistema”, opinó Lifschitz sobre el pedido de María Eugenia Vidal para eliminar el tope del Fondo del Conurbano, lo que podría ir en desmedro de otras arcas provinciales.
Avisó que “si se diera curso a esa demanda, pondríamos a todas las provincias en una situación de quebranto económico y de ingobernabilidad política, cosa que sería gravísima para la Argentina”.
En ese sentido, propuso “buscar otro camino, por lado del diálogo y en el marco del Congreso nacional” para evitar que un eventual refuerzo de recursos a Buenos Aires repercuta negativamente en el resto de los distritos.
El jefe de Estado santafesino destacó la “señal política inédita” que representó el encuentro de este miércoles con “21 gobernadores de diferentes signos políticos” en Capital Federal, donde se estableció “una posición unánime para que no resuelva la Corte hasta tanto no se escuche a las provincias y no haya un acuerdo en el Congreso nacional”.
Inicialmente, el encuentro estuvo planteado para los mandatarios del justicialismo, pero luego la convocatoria se amplió a todos aquellos preocupados por el impacto que tendría en sus cajas el reclamo de Vidal.
La polémica demanda
El año pasado, la gobernadora bonaerense había pedido ante la Corte Suprema la eliminación del tope del Fondo del Conurbano, fijado en 650 millones de pesos y que de ser aceptada significaría para la vecina provincia una actualización del orden de los 53 mil millones de pesos.
El problema es, alertó Lifschitz más temprano en Radio 2, que esa diferencia saldría del Fondo de Coparticipación Federal y las otras provincias dejarían de recibir montos que van entre los 1.500 millones de pesos y los siete mil millones. Para Santa Fe incluso, el tema es más complejo porque la Casa Gris todavía trata de cobrar la deuda de Nación por la que obtuvo un fallo favorable de la Corte pero que no se efectivizó.
En ese sentido, el gobernador dijo que la "legitimidad de la deuda está acreditada y la obligación de pago es ineludible". Y si bien advirtió que la voluntad de la provincia es seguir por los canales de la negociación, van ya 20 meses de gestión macrista y pese a las promesas no hay aún nada concreto. "Estamos con la expectativa de que en las próximas semanas haya respuesta positiva; de lo contrario tendremos que volver a recurrir a la Corte", dijo.
De la reunión en la casa de San Juan en Buenos Aires participaron, además de Lifschitz, Juan Schiaretti (Córdoba), Alfredo Cornejo (Mendoza), Gerardo Morales (Jujuy), Ricardo Colombi (Corrientes), Alberto Weretilneck (Río Negro), Omar Gutiérrez (Neuquén), Domingo Peppo (Chaco), Carlos Verna (La Pampa), Gildo Insfrán (Formosa), Hugo Passalaqua (Misiones), Juan Manuel Urtubey (Salta), Roxana Bertone (Tierra del Fuego), Gustavo Bordet (Entre Ríos), Sergio Uñac (San Juan), Juan Manzur (Tucumán) y Lucía Corpacci (Catamarca).
Firmaron un documento de cuatro puntos que difundieron al finalizar el encuentro y que puntualiza:
“Respecto del reclamo judicial planteado por la provincia de Buenos Aires en torno al tema Fondo del Conurbano, los gobernadores abajo firmantes acordamos manifestar:
1) Que la pretensión de la provincia de Buenos Aires perjudica gravemente al resto de las provincias y municipios
2) Que siendo un tema que involucra la relación Nación-Provincias, su tratamiento indefectiblemente debe darse a través del debate entre Nación, las Provincias y el Congreso de la Nación.
3) Solicitar respetuosamente a la Corte Suprema de Justicia no tome resolución alguna hasta tanto sean escuchadas todas las jurisdicciones y se dé el debate correspondiente entre la Nación y las Provincias y el Congreso de la Nación.
4) Que ratificamos la permanente predisposición al diálogo y la búsqueda de soluciones consensuadas".