El gobernador Miguel Lifschitz se manifestó “muy preocupado” por el ataque contra la casa del padre del juez Juan Carlos Vienna, anunció que se reforzará la custodia sobre las familias de magistrados y fiscales que hayan tenido alguna participación en la investigación sobre la banda de Los Monos, y advirtió: “Tenemos que imponer la decisión de la Justicia y la voluntad del Estado de hacer cumplir la ley y pacificar la ciudad”.
Lifschitz –en diálogo con el programa A diario, que conduce Alberto Lotuf en Radio 2– se refirió al ataque perpetrado anoche contra la casa del padre de Vienna, en Laprida al 3600, donde según desconocidos en un auto efectuaron cinco disparos. Un día antes, habían baleado una casa que aparentemente se confundieron con un inmueble de la ex mujer del mismo magistrado. Pero además, semanas atrás atentaron contra una propiedad que perteneció al juez Ismael Manfrín, quien presidió el juicio a la banda de Los Monos.
“Se está investigando, estamos muy preocupados por la situación porque parecía un hecho aislado; pasa a ser una situación de mayor complejidad”, dijo el gobernador luego del tercer ataque de este tipo.
Y anunció que tras reunirse con el propio juez Vienna, el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, planificó “un mecanismo de seguridad mucho más abarcativo que el que teníamos hasta ahora, que involucre a familiares directos” de jueces y fiscales que intervinieron en la investigación de Los Monos.
“Vamos a poner todas los herramientas para garantizar la seguridad de los funcionarios judiciales. En esta pelea no podemos retroceder. Tenemos que imponer la decisión de la Justicia y la voluntad del Estado de hacer cumplir la ley y pacificar la ciudad”, enfatizó.
