“Cruce despacio. Hay un zorro (escondido)”. La frase no pertenece a ninguna campaña municipal de tránsito sino que es producto del ingenio y el humor de Jorgito, el Potro, el famoso comerciante de Entre Ríos y Cochabamba quien, a fuerza de carteles ocurrentes y sostenidas muestras de solidaridad, recibió una distinción de parte de los concejales rosarinos.
Sin embargo, esta vez fue diferente ya que la realidad superó la buena onda de Salvador Saggal, según se puede ver en la foto que enviaron a Periodismo Ciudadano.
En la imagen capturada, un grupo nutrido de policías y agentes de la Dirección de Tránsito Municipal realiza un operativo para el cual cortaron la circulación de vehículos. Es evidente que un conductor desprevenido “cayó” en manos de las autoridades.
Pero, lo más gracioso de la escena es lo que sucede en primer plano. Es que detrás del gracioso cartel que Jorgito colocó frente a su negocio, dos agentes se apostaron, ignorantes de la leyenda que el Potro, en un acto visionario, dejó clavado para el disfrute de quienes pasean por la zona.
Sin embargo, esta vez fue diferente ya que la realidad superó la buena onda de Salvador Saggal, según se puede ver en la foto que enviaron a Periodismo Ciudadano.
En la imagen capturada, un grupo nutrido de policías y agentes de la Dirección de Tránsito Municipal realiza un operativo para el cual cortaron la circulación de vehículos. Es evidente que un conductor desprevenido “cayó” en manos de las autoridades.
Pero, lo más gracioso de la escena es lo que sucede en primer plano. Es que detrás del gracioso cartel que Jorgito colocó frente a su negocio, dos agentes se apostaron, ignorantes de la leyenda que el Potro, en un acto visionario, dejó clavado para el disfrute de quienes pasean por la zona.