Un espectáculo único por donde se lo mire. La final del Super Bowl se vivió a lo largo y ancho de todo el mundo, con 111 millones de espectadores. Más allá del imponente show de Lady Gaga en el entretiempo, los equipos estuvieron a la altura y protagonizaron un partido que pasará a la historia por el gran primer tiempo de Atlanta Falcons, la remontada de los Patriots sobre el final, la leyenda Tom Brady como protagonista y la definición en tiempo extra, algo que ocurrió por primera vez.
Un encuentro que tuvo una primera etapa arrolladora por parte de Atlanta, colocándose 28-3 arriba en el marcador y teniendo la precisión como principal característica. Estaban consiguiendo su primer Super Bowl, pero la historia no estaba terminada.
El entretiempo sirvió para marcar un quiebre y generar un cambio drástico en la forma de juego de los Patriots, que tienen espalda e historia a la hora de jugar y ganar finales. Tom Brady mejoró notablemente el juego y fue la pieza clave para la remontada que fue histórica. En el último minuto del juego logró la igualdad 28-28 en el marcador y eso indicaba otro momento único: por primera vez la final se iba a definir en la prórroga.
El momento más importante del partido fue una continuidad del último cuarto, donde un touchdown de James White decretó la victoria de su equipo por 34-28, siendo la quinta vez en la historia que los Patriots ganan una final de Super Bowl.
Una noche que volvió a captar fanáticos de todo el mundo, y también logró la atención, como siempre, de quienes nunca miran un partido de fútbol americano durante el año. Todos coinciden hoy que los equipos estuvieron a la altura y que será difícil olvidar una final como la de este domingo.