El papa Francisco animó este domingo a un grupo de madres a "amamantar sin miedo" dentro de la Capilla Sixtina, durante la celebración de la misa de bautismo de 28 pequeños hijos de empleados de la Santa Sede.
"Comenzó el concierto", afirmó el Pontífice entre risas cuando un grupo de los 15 niños y 13 niñas que recibieron el Bautismo comenzaron a llorar apenas pasadas las 9.30 locales (5.30 de Argentina).
"Es porque los niños se encuentran en un lugar que no conocen, quizás se levantaron antes de lo habitual. Empieza uno y después los otros. Algunos lloran simplemente porque llora otro", agregó luego el Obispo de Roma en la ceremonia realizada en la célebre sala de los Museos Vaticanos pintada por Miguel Ángel.
"Y como la ceremonia es un poco larga, quizás alguno llora de hambre. Si es así, les digo a ustedes las madres: ¡amamanten! Sin miedo, con toda normalidad. Como María amamantaba a Jesús", agregó durante la homilía.
Luego, de cara a los padres y a más de 200 parientes que colmaron la espectacular sala sede de los cónclaves, Francisco animó a los familiares a "hacer crecer la fe y custodiarla" en los niños.
La capilla, que tuvo varias restauraciones a los largo de sus más de 500 años, fue construida en 1484 para el papa Sixto IV, a quien le debe el nombre, pero fue Julio II quien encargó a Miguel Ángel su decoración, primero con la Bóveda y luego con "El Juicio Final".