El operativo “Granja invisible” que encabezó el secretario de Seguridad Sergio Berni desbarató este viernes un grupo de narcotraficantes que cultivaba marihuana entre tomates y morrones en una quinta de Merlo. La investigación tomó seis meses pero permitió, finalmente dar con la finca y con cuatro de sus gerentes. Se quemaron más de 3 mil plantas de cannabis.

Según informó Télam, Berni detalló que la plantación, localizada en la ciudad de Mariano Acosta del partido de Merlo, tenía "tres mil metros cuadrados y casi cuarenta invernaderos", en un predio "cuya actividad principal es la siembra de tomates y morrones", pero "escondidas, camufladas, había casi tres mil plantas de marihuana de primera calidad".

El juez federal de Campana, Adrián González Charbay permitió la quema de la droga al entender que "por la particularidad del caso” ya contaban con todas las pruebas necesarias y no hacía falta almacenar tamaña cantidad de marihuana.

Y es que el operativo también incluyó "siete allanamientos en diferentes lugares de la Capital Federal y conurbano bonaerense, donde fueron detenidos los cuatro sindicados cabecillas y dueños de esta plantación”. Secuestraron allí importante documentación y autos de alta gama.

Berni añadió que se trató de una pesquisa "por venta de marihuana en la que se dió con los proveedores, que eran los de esta plantación, donde habían traído a quince personas que estaban en un estado de semiesclavitud, y eran utilizadas en la explotación y el cultivo del tomate y el morrón, además de la marihuana".

En el operativo participaron efectivos de la Policía Federal y de la bonaerense, y la causa fue caratulada como "siembra y cultivo de estupefacientes y trata de personas".