Macabro y doloroso. Este martes al mediodía, un bebé fue encontrado muerto en un basural en avenida Sabín y Olivé, en la zona noroeste de Rosario. Testigos apuntaron a una camioneta que podría haberlo dejado allí.
Según los primeros datos, una mujer encontró el cuerpo del pequeño en una bolsa en un contenedor y llamó al Sies. Esta persona había ido junto a otras a limpiar los alrededores del volquete ubicado en ese sector.
Según le dijo a El Tres, todos los días realizaban esa tarea. Los médicos confirmaron el hallazgo del cadáver.
La fiscal de turno, Georgina Pairola (de la Unidad Homicidio Dolosos), estaba en el lugar al mediodía. Allí, tomaron testimonio a la mujer, de nombre Zulma, que encontró el cuerpo, y a algunos otros testigos.
En el barrio había gran conmoción y un comentario de los vecinos: que un utilitario Renault Kangoo había parado en el lugar este martes a primera hora y que bajaron dos personas –aparentemente ambos hombres– y habían dejado bolsas en el contenedor.
Pairola detalló a la prensa que el bebé fue encontrado junto a la placenta y que por su peso y apariencia había nacido a término. A simple vista no presentaba signos de violencia pero se encargaron las autopsias correspondientes.
Además de la bolsa en la que estaba el cuerpo, se secuestró otra con prendas de vestir.
Finalmente, la fiscal confirmó que hay cámaras de videovigilancia en la zona y se solicitaron las imágenes para la investigación, aunque no tenía certeza de que el lugar preciso del volquete estuviera dentro del alcance de dichas cámaras.