Un estudio publicado en "The Lancet" alerta del riesgo de usar tratamientos para bajar la presión arterial en pacientes con una enfermedad coronaria después de que un estudio con más de 22.000 pacientes haya revelado que quienes tienen unos niveles demasiado bajos presentan peores resultados, según el sitio noticias.lainformacion.com.
La necesidad de mantener una presión arterial óptima en los pacientes con hipertensión sigue siendo objeto de debate, sobre todo en quienes presentan una enfermedad de las arterias coronarias, según ha reconocido Philippe Gabriel Steg, cardiólogo del Hospital Bichat Paris (Francia) e investigador principal de este trabajo que también se ha presentado en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología que se celebra estos días en Roma (Italia).
En el registro "Clarify", que incluyó un total de 22.672 pacientes con cardiopatía isquémica estable de 45 países, se evaluó la relación entre la presión arterial conseguida con el tratamiento y los resultados cardiovasculares obtenidos en quienes presentaban hipertensión.
El primer resultado a tener en cuenta fue la combinación de muerte cardiovascular, infarto de miocardio o un accidente cerebrovascular. Y también se tuvieron en cuenta como resultados secundarios cualquier causa de muerte y los ingresos por insuficiencia cardiaca.
Después de una mediana de seguimiento de cinco años, tener una presión arterial sistólica de más de 140 mmHg y una diastólica de más de 80 mmHg se asoció a un mayor riesgo de eventos cardiovasculares. Unos resultados que "están en línea con las recomendaciones de reducir la presión arterial por debajo de esos niveles", ha reconocido Steg.