Mediante el bloqueo de la expresión de un determinado gen, investigadores de la Universidad de Montreal (Canadá) han logrado reducir en grandes cantidades la concentración de triglicéridos en la sangre, incluso en varias formas graves de la hipertrigliceridemia.
«Nuestro estudio sugiere que la proteína apoC-III juega un papel clave en la gestión de los triglicéridos. Los triglicéridos, como el colesterol, son lípidos, provienen de grasas transportadas por nuestra comida o son producidos por nuestro cuerpo. Dependiendo de la causa, la acumulación de triglicéridos en la sangre está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares y de páncreas y otras complicaciones» explica Daniel Gaudet, primer autor del estudio que se publica en «The New England Journal of Medicine».
Aunque existen formas raras en la que la acumulación de triglicéridos tiene una causa genética, para las que además hay pocos tratamientos efectivos, la hipertrigliceridemia (exceso de triglicéridos) es la que más a menudo se relaciona con problemas de salud frecuentes, como la obesidad o la diabetes.
En diciembre pasado, el mismo equipo de demostró que el bloqueo de la expresión del gen que codifica apoC-III lograba una disminución importante de la trigliceridemia en los pacientes con una forma rara y extrema de la hipertrigliceridemia, lo que abrió la puerta para la identificación de los mecanismos que controlan la grasa en la sangre. Ambos estudios fueron publicados en «NEJM».
Grasas
Los resultados demuestran la importante contribución de apoC-III de los complejos mecanismos mediante los cuales nuestros cuerpos manejan la grasa en la sangre. «Si logramos descifrar estos mecanismos podríamos diseñar intervenciones individuales precisas para la prevención del riesgo asociado a las diversas causas de hipertrigliceridemia grave», señala Gaudet. Además, concluye, «los resultados de estos estudios permiten acelerar en la investigación para comprender y controlar mejor diversas formas de hipertrigliceridemia grave».
Fuente: abc.es