Denunciado por una compañera de trabajo por acoso sexual, este lunes el periodista Ari Paluch rompió el silencio. En su programa de radio, El exprimidor, contó la situación que originó la acusación, dijo que fue difamado injustamente y pidió disculpas.
"He sido difamado de una manera demoledora y no he respondido a ninguno de los medios que tan amablemente se han acercado, pero quiero usar mi programa de radio para hacer mi descargo", señaló Paluch en la apertura de su programa. Allí mostró y leyó el escrito que presentó a las autoridades de América y dio a la audiencia su versión de lo ocurrido con la microfonista que lo acusó de tocarle la cola.
Sigan difamando con relatos falsos, la verdad esta surgiendo a cada instante, rezo por quienes buscan 15 minutos de fama, a costa de mi carrera. Ah, no me dejo manchar mas, preparense para hacerse cargo
— Ari Paluch (@paluchari) 23 de octubre de 2017
Una cosa es la información y su tratamiento con cierta ecuanimidad y otra es lisa y llanamente una campaña difamante por razones que trascienden la mera noticia.Muchachos, disimulen un poco
— Ari Paluch (@paluchari) 23 de octubre de 2017
Paluch explicó que en realidad su intención fue tocarle la cadera a modo de salud: "Cuando me quiero despedir de la chica en vez de hacerle un give me five (choque de palmas) toco con una de mis manos, ya no recuerdo cuál, su cadera".
Reconoció, con la voz quebrada que su mano tocó algo más que la cadera pero que inmediatamente se dio cuenta y le pidió diculpas a su compañera.
"Yo no sé si la chica se movió o yo tuve poca puntería y toqué su cadera y una parte íntima, pero eso fue todo lo que pasó y lo mismo hubiera hecho con David, el otro microfonista. Cuando me percato que la mano mía además tocó otro lugar, pido disculpas", abundó.
"Además si alguien tiene un poquito de sensatez y piensa que voy a ir por la vida tocando culos... si yo soy un acosador tengo que aprovechar una situación cuando estoy a solas, no adelante de 20 personas", añadió.
Por otro lado, Paluch también contó que cuando las autoridades de América le dijeron al otro día "que habían hecho una denuncia", él se puso a total disposición de la empresa.
"Puedo entender que la persona en cuestión se haya sentido ultrajada pero no fue mi intención y vuelvo a pedir disculpas. A partir de ahí todo lo que se dijo de mi persona no es de mi agrado ni de mi familia", indicó antes de mencionar que entiende algunas reglas y que si "llegara a darse la necesidad judicialmente" está decidido a accionar.